Víctima de una enfermedad terminal, la viuda de Enrique “Kike” Espósito falleció a las 9 de la mañana en su departamento de Santa Fe 1268, donde cumplía prisión domiciliaria. Estaba a la espera de un segundo juicio por el crimen perpetrado a mediados de 2011 en Villa Nueva
Nora Lilián Abelleira (59), la mujer que a mediados de 2015 fue condenada a prisión perpetua por el homicidio de su marido, el empresario lácteo Enrique José “Kike” Espósito (52), falleció ayer a la mañana mientras se encontraba en su departamento de Santa Fe 1268, donde cumplía prisión domiciliaria por resolución judicial.
Abelleira padecía una enfermedad terminal (cáncer), motivo por el cual la Cámara del Crimen de Villa María había dispuesto, a fines del año pasado, que fuera trasladada desde la cárcel de barrio Belgrano, donde se encontraba alojada desde el 18 de diciembre de 2012, a su vivienda particular, ubicada en el 4º piso del denominado “edificio Mignola”.
El deceso de quien llegó a juicio acusada de contratar a un sicario para asesinar a su concubino y, de ese modo, poder disponer libremente de una fortuna cercana a los tres millones de dólares, se produjo alrededor de las 9 de la mañana de la víspera, en momentos en que se hallaba en su domicilio del centro de la ciudad junto a una de sus hijas y otros familiares.
La pena máxima
Cabe recordar que el 19 de junio de 2015, en fallo unánime de jueces y jurados populares, Abelleira había sido declarada “partícipe necesaria de homicidio doblemente calificado, por promesa remuneratoria y por la utilización de un arma de fuego”, en relación al crimen de Espósito, quien murió tras recibir dos balazos, uno de los cuales impactó en su cabeza la noche del viernes 17 de junio de 2011 en la vivienda que la pareja ocupaba en Villa Gesel 170, en barrio Costa de Oro de Villa Nueva.
Al dictar sentencia luego de 12 extenuantes audiencias de debate, la Cámara del Crimen absolvió por mayoría de votos (6 a 4) al parapsicólogo José Alberto Deheza (52), alias “Calladito”, el hombre que estaba acusado de ser el sicario contratado por la mujer para dar muerte al empresario oriundo de Buenos Aires.
La absolución de Deheza llevó al fiscal Francisco Márquez a apelar esa parte del veredicto y poco más de un año después, más precisamente el 4 de noviembre de 2016, la Sala Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Provincia le dio la razón: declaró nulos la sentencia y el debate de aquel juicio y ordenó la realización de un nuevo proceso oral y público, pero en la Cámara del Crimen de Bell Ville.
El nuevo juicio iba a comenzar el pasado 2 de octubre, pero un par de semanas antes la deteriorada salud de Abelleira obligó a la Justicia a suspender el debate y dispuso que se lleve a cabo durante 2018, aunque todavía no se había fijado la fecha.
Ahora, los miembros del tribunal bellvillense deberán resolver cómo y cuándo se realiza el juicio, en el que solo comparecerá José Deheza, acusado por el mismo delito que se le atribuía a la mujer (“homicidio doblemente calificado, por promesa remuneratoria y por el uso de un arma de fuego”), pero en calidad de “autor material”.
Los restos de Nora Abelleira son velados en la sala que la empresa fúnebre Paviotti posee en Catamarca y Parajón Ortiz y recibirán sepultura hoy a las 10, en el cementerio parque La Naturaleza.