La Asociación Vida Nueva crea su espacio en medio de la necesidad de cuidar y albergar a los perros abandonados
La necesidad de ayudar a la enorme cantidad de perros abandonados por sus dueños generó la inquietud de más vecinos en Villa María y ahora está naciendo “Vida Nueva”, otro centro de adopción que albergará a los animales en la ciudad.
El emprendimiento surgió hace un año, tiene a siete personas trabajando y se encuentra cerca de la autopista.
Entre los que motivaron este refugio se encuentra Cecilia Bessone, quien ya formó parte de otros proyectos similares y busca seguir tendiendo una mano.
“Hace un año que venimos con esto, pero lo hacemos como podemos porque el único día que nos queda es el domingo y entonces vamos todos hacia allá para seguir trabajando”, cuenta la proteccionista. “Ahora estamos en la etapa final, esperando que la gente nos dé una mano para solventarnos”, agregó.
Además, contó que todos los integrantes de esta Asociación Vida Nueva van por el mismo objetivo, aunque algunos no quieran ser catalogados como proteccionistas porque lo consideran un halago más grande.
“Somos compañeros chicos que nos unimos para empezar el proyecto. Todos saben un poquito de algo, unos de albañilería, otros de gráfica… De a poquito fuimos haciendo cosas y llegamos hasta donde estamos porque estamos deseosos de que todo sea para bien”, indicó Bessone.
En Villa María, más allá del Centro de Adopción Municipal (CAM), la Protectora Sarmiento hace un gran trabajo, como también Mi Protector en Villa Nueva. No obstante, los refugios no parecen alcanzar.
Cada vez hay más perros en las calles e incluso hay quienes se acercan a estos lugares directamente a abandonar y tirar a los cachorros recién nacidos.
“Cuando tiran perros por arriba de los caniles, la gente no tiene idea de que hay que saber separar a los animales, entonces, tiran a recién nacidos con otros perros más grandes que terminan matándolos”, contó la proteccionista.
En ese sentido, remarcó que “momentáneamente, vamos a tener la cantidad de perros que podamos solventar y atender; no podemos tener 100, por ejemplo”.
“De acuerdo a la cantidad de socios que tengamos y el dinero que recaudemos, iremos viendo cómo mejorar”, añadió.
También sostuvo: “Queremos hacer un lugar lindo, parquizado, para que la gente pueda pasar allí los fines de semana, hacer eventos… queremos hacer algo distinto, como un centro de adopción”.
En ese sentido, Vida Nueva ya lanzó una campaña para que la gente se asocie (al Whatsapp +54 9 353 563-0730).
“Todos sabemos que los refugios no deberían existir en una sociedad más madura porque muchas veces los animales que nacen terminan la vida ahí, pero todos somos conscientes de que si no existieran esos lugares, el animal muere más rápido y de manera más cruel”, puntualizó Cecilia, quien llega a tener hasta 18 perros en su casa.
Es por ello que señaló que más allá del cuidado a los canes, el objetivo de Vida Nueva es “concientizar a la gente de que adopte perros y de que no los compre”.
“Trataremos de hacer una movida linda para que la gente nos apoye, sumándose a adoptar, a castrar”, agregó.
Por lo pronto, quiso “agradecer a la gente que apoya, que nos han prestado este lugar”, y reveló que en virtud de esta necesidad, el espacio “surge gracias a que un matrimonio presta un pedazo de su campo para empezar el proyecto”.