Referentes de fiestas populares rechazaron la posibilidad de terminar con la elección de su soberana. Coincidieron todos en que no se trata de certámenes donde lo estético se imponga, rescataron la instancia de la entrevista previa al evento y el costado “cultural” de la elegida
La iniciativa del municipio de Villa General Belgrano de poner fin, por ordenanza, a la elección de reinas en los festejos de esa localidad serrana, disparó cierta polémica a través de los medios de comunicación y las redes sociales, apuntando contra la «cosificación» de la mujer y que sea «tratada como un objeto».
Producto lácteo
«No se puede confundir un concurso de belleza con la elección de una soberana que represente en todo el país a un pueblo, su cultura, la economía regional y la fiesta misma», sentenció Mónica Capellino, delegada de la Fiesta Nacional del Producto Lácteo que se realiza en Arroyo Cabral.
En el mismo sentido se expresaron referentes de fiestas nacionales y provinciales, fiestas populares que entienden de la misma manera o coinciden en muchos aspectos de la elección de la «reina» de la festividad.
«No es una Miss Córdoba ni una Miss Argentina. No se trata de modelaje. Para nuestra fiesta no se trata de un certamen de belleza, porque para nosotros es la elegida representante de la cultura del lugar», explicó Capellino.
Añadió que «por un año, la joven que resulta electa reina representa y difunde la cultura y la actividad económica del lugar», en alrededor de «35 mil kilómetros» que recorre en su mandato visitando diversas celebraciones del territorio nacional. «Son promotoras que van a dar a conocer lo nuestro a partir de su investidura», resumió.
En cuanto al proceso de selección, apuntó que «en primer lugar está la entrevista que se le realiza a la candidata, y luego cómo se desenvuelve en público, porque será por un año la cara visible de nuestra fiesta. Conformamos jurados imparciales (locales y visitantes) donde incluimos al menos una exreina y a quienes sugerimos que la postulante sepa de Arroyo Cabral, del producto lácteo, de nuestra cultura y las diversas actividades que se desarrollan en el lugar.
Del tambo
Mariana Scaramuzza, de la Fiesta Nacional del Tambo de James Craik, madre de una exreina y ahora integrante de la comisión organizadora, dijo a EL DIARIO: «Siempre que he participado con mi hija en fiestas o como jurado, no se toma a las chicas como objeto, no se piden medidas, ni altura ni color de ojos en especial». En cambio, aseguró que «mucho depende de la entrevista, porque son promotoras culturales».
«Es más cultural que otra cuestión. Puede tomarse como superficial porque argumentan que quedan tristes quienes no resultan electas, pero quienes pierden o quedan segundos en el fútbol y otros deportes?, ¿qué vamos a decir?», expresó.
Scaramuzza narró que «las chicas, cuando ya son reinas electas y viajan a fiestas, ellas se arreglan, se pintan, y no compiten. Eso da otra pauta de la libertad con la que eligieron estar allí». En el período de «reinado», la representante craikense recorre unos 15 mil km, «donde se encuentran con amigas, pares de esa actividad, conviven, se alegran y comparten mucho».
En cuanto a que las postulantes recorran la pasarela en traje de baño, se manifestó «en desacuerdo, algunas chicas incluso no se animan a presentarse por eso, pero se viene revisando y debatiendo eso».
Model Tour
Mateo Carrizo es delegado de la San Francisco Model Tour, organizada desde la Agrupación San Francisco de Asís, y desde hace cinco años trabaja junto a los centros vecinales para concretar cada edición de esta fiesta que se eligió a partir de una encuesta.
Carrizo se encarga desde antes de este tipo de «producciones», entre las que cuenta como logro la realización de Miss Universo Córdoba.
El festejo local al que está abocado incluye una preselección de candidatas, libre, en cada uno de los barrios sanfrancisqueños para llegar al día del evento. «Esto antes se hacía en una escuela de modelos y ahora cada vez es más federal. Si bien por el reglamento de la franquicia hay que cumplir una serie de requisitos (más de 18 años, 1,70 metro de estatura y no ser mamá), creemos que no es discriminar», indicó Carrizo.
Repasó que «se respeta mucho la edad por los viajes, para que sea satisfactorio, y en eso buscamos equilibrio». «Estamos convencidos de que un certamen de belleza es otra cosa, como cuando una marca de productos para el cabello elige a quien luce mejor el pelo. En Miss Universo se puede ver que son todas profesionales o en carrera, es más complejo y hay que valorarlo», planteó.
Subrayó: «Nunca vemos a una aspirante a Reina como un objeto, vemos una embajadora que viene a representar a una fiesta, quien lleva a cultura de esa localidad, la región y lo muestra de la mejor manera. No se puede hablar así, diciendo que se discrimina. Para nada».
Contó que participan de unas 60 festividades por año y respecto al uso de traje de baño señaló que «no es regla general y muchas fiestas ya lo sacaron».
Expo Granja
Jorge Gastaldi, de Expo Granja, que se edita en la localidad de Viamonte, mencionó que «desde hace cuatro años se elige la Reina Nacional, pero hace 30 que se celebra este encuentro, aunque casi de entrecasa (surgió en su predio, de hecho)».
«Que la Reina lleve cultura e idiosincrasia de nuestras fiestas populares no es un certamen de belleza. Representa la cultura de cada localidad y de su provincia en muchos casos», aseveró el hombre. Reprochó que se asocie esta actividad «con el ‘Ni una menos’» y afirmó que «en primer término se realiza una entrevista personal y donde se pregunta sobre la temática de Viamonte» a las jóvenes de todos los clubes de la región que son convocados anualmente. «Buscamos más una persona que sepa comunicar, que se desenvuelva ante el público y los medios de prensa que la entrevisten para dar a conocer lo nuestro. Los ministerios, además, no otorgan categoría a una fiesta si no se cumple una serie de formas. La fiesta ha trascendido y hace conocer a nuestro pueblo y en ello mucho tiene que ver la representante».
Gastaldi refirió que viajaron 60 mil kilómetros en un año logrando presencia en 70 fiestas.
Sobre el uso de traje de baño precisó que en Viamonte no se usa porque desde el principio trabajaron junto a los colegios y porque «apuntamos a la cultura y no al modelaje».
Del Maní
«Nuestra fiesta no es un concurso de belleza. No buscamos medidas ni rubias ni ojos claros. La embajadora sale a vender nuestra festividad, está preparada y sabe de lo que habla». De esta manera, Ramón Cofré dejó en claro la posición de la Fiesta Nacional del Maní, que desde hace seis décadas se celebra en Hernando.
Sostuvo que «la elección de una soberana es importantísima porque promociona, habla de la producción del maní y todo lo que lo rodea, la ciudad. A veces acompaña al intendente de nuestra localidad a la Casa Rosada, por lo que debe estar preparada».
Cofré se dijo «sorprendido porque en Villa General Belgrano la soberana (de la Oktoberfest) viste prendas típicas».
«No buscamos a la chica más bonita, si bien el jurado toma parámetros sugeridos, está integrado por profesionales, esteticistas y analizan mucho su desenvolvimiento antes que la belleza», deslizó.
Recordó que «hay lugares como Villa Gesell que dejaron de lado la elección de reinas, después de polémicas como ésta, y ahora estarían retomando». «Hay que ver el crecimiento de las representantes luego de estos mandatos con tantos viajes, tanto participar. La gente que está opinando no conoce desde adentro de qué se trata», sentenció Cofré.
En cuanto a distancias recorridas, se excusó de llevar la cuenta, pero sintetizó que estuvieron en Chaco, Jujuy, Bariloche…
Al final, sobre la pasada de las postulantes en traje de baño, aseguró que «hace como ocho años ya no se hace y quedan pocas fiestas que lo mantengan, porque después la consagrada viste vestidos largos de noche o ropa deportiva. No va más».
Oro Blanco
«No, estoy en desacuerdo». Fátima Komarevich, delegada y ex-Reina de la Fiesta Nacional del Oro Blanco, que se celebra en Canals. Marcó que «al dialogar con el jurado, lo último que marcamos es la belleza, es un complemento, nunca va primero ni puede determinar nuestra representante. Se puede y debe imponer la simpatía, cómo se desenvuelve».
«En nuestra fiesta no se elige la reina de la belleza. Esa es una frase equivocada. Se realiza una entrevista entre jurado y postulantes, esto hace que no sea una elección a dedo a la más linda. En nuestra fiesta han participado modelos de distintas agencias y escuelas y no han sido electas», narró Komarevich.
Para la canalense, «las reinas y princesas que representan a distintas fiestas van tejiendo relaciones muy fuertes, muy buenas, que derivan a veces en amigas estudiando y conviviendo juntas en una ciudad que no es la de ellas, como Villa María o Córdoba».
Las fiestas populares necesitan una representante. En nuestra elección no se discrimina, no se sube a todas a un escenario y se elige así nomás».
Y en cuanto a los trajes de baño, confió que «para la elección de la Reina del Oro Blanco, sí, pero la primera noche, que se elige a la Reina local, no».
La festividad, que lleva 46 ediciones en Canals, no tiene límites en su representación, por lo que alterna entre Reina y princesas sus viajes, ya que la actual soberana, Danisa Rojas, es de Alejandra (Santa Fe), distante 500 kilómetros de allí.
De Peñas
El titular del Ente Deporte y Turismo Villa María, Marcos Bovo, se refirió a la elección de la Reina Nacional de Peñas: «Lo que reimpulsamos (desde 2011) es un proceso de representatividad a partir de elegir sobre virtudes actitudinales a una persona íntegra. Para ello se constituye en ocasión un jurado interdisciplinario compuesto por psicólogo, profesores de Historia, Geografía y Educación Física».
En el mismo sentido, expuso que «no se pone el eje en la belleza de la mujer, ponemos el foco en lo humano y creemos que ese debe ser el espíritu. Tenemos muy presente que será la persona que nos represente luego y quien hablará de la ciudad».
Bovo dijo que desconoce en particular la normativa impulsada desde Villa General Belgrano, pero arriesgó en cuanto a una presunta cosificación de la mujer o discriminación: «No lo hemos percibido así, creo que todos tienen libertad de participar en lo local».
«Muchas veces hay padres que nos transmiten que la decisión de acompañar es el aspecto humano que se trabaja aquí», reflejó el funcionario villamariense.
Subrayó que «la elección de la soberana» del Festival «no se resuelve en un solo día, sino que hay una preparación de cuatro jornadas a pleno».
Con un itinerario que ronda los 40 mil kilómetros, Bovo sostuvo que la elección «va más allá y de seguro no hay una cosificación. Porque a través de ella se muestra el esfuerzo comunitario, es la representación de un pueblo, de mucho trabajo de una fiesta que lleva todo un año».
Por último, sobre el traje de baño confirmó que «no se usa en la elección de la Reina de Peñas de Villa María y sí en la instancia final, todas usan un mismo modelo de vestido».
Punto clave
Uno de los puntos cuestionados es la pasarela en traje de baño, pero Capellino sostuvo que «si bien en un momento se quiso cancelar esa instancia, se mantuvo para observar cómo camina y se mueve ante el público, su elegancia y si se inhibe… Podría pasar a ser un desfile en ropa deportiva, pero por ahora se mantiene en lo que es maya entera de color negro, pero queda en el punto de vista de cada uno y creemos que no hace a la decisión final, o no debería».
Por último, la delegada marcó que «se cuestiona mucho a veces, pero en realidad, quien no lo vive, no lo entiende».
UN SIMPOSIO, SI ES NECESARIO
Los delegados de las festividades que trabajan a la par de reinas y postulantes planean un simposio donde cada uno de ellos y las soberanas manifiesten su punto de vista. El mismo se podría concretar en las próximas semanas. Uno de los puntos de encuentro para definir esa fecha será en la más antigua de las festividades, las Fiestas Julias que organiza el Club Atlético y Filodramático Alicia (CAYFA), el próximo sábado 2 de julio.