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«Nuestra misión es acercar culturas»

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«Nuestra misión es acercar culturas»
Giusiano disertó el miércoles pasado ante una sala colmada

CHARLA – Eduardo Giusiano contó sus experiencias por el mundo

Es ingeniero y especialista en management, pero su pasión es recorrer el mundo. En OSDE presentó su proyecto “La familia viajera” y el libro “Guardianes de sueños”. El, su esposa y sus cuatro hijos llevan visitados más de 60 países

Eduardo Giusiano cuenta que desde que tiene uso de razón se imaginaba viajando. Que, utilizando uno de los términos más frecuentes en management, la especialidad que desempeña profesionalmente en la actualidad, tuvo “una visión”.

Figúrese, lector o lectora, a un gurrumín de 6 o 7 años leyendo libros o las colecciones de Robin Hood y pensándose frente a las pirámides de Egipto, con brazos en jarra, luciendo un uniforme de color caqui y casco “bombé”.

Ahora, imagínese a María Alejandra Barrios, una adolescente cuyo anhelo a futuro era conformar una familia grande y tradicional con cuatro hijos (Sofía, Sabrina, Matteo y Tomás).

Lo peculiar del caso es que ambos confluyeron en Resistencia, Chaco, su lugar de residencia, en un proyecto en común que terminó resultando en “La familia viajera”, un emprendimiento particular de recorrida por el mundo que ya ha plantado bandera en los cinco continentes, en más de 60 países y con cuatro chicos a cuestas.

“Nos juntamos para complicarnos nuestros sueños”, dijo Giusiano entre risas el miércoles pasado en el auditorio de OSDE y en el marco de una jornada organizada por la firma de turismo Interturis.

 

¿Se puede viajar con poca plata?

Eduardo, ingeniero, hijo de padre cordobés de Viamonte y madre entrerriana, alentó a los presentes a desembarazarse de las excusas para viajar y a ser eficiente en el uso de dos recursos básicos escasos: “El tiempo y el dinero”.

Apoyado en imágenes propias capturadas de sus imperdibles travesías y en su libro denominado “Guardianes de sueños”, Giusiano remarcó que su afán viajero terminó reconvirtiéndose en la misión de “acercar culturas”. “Nuestra intención es mostrar que, más allá del color de piel, de la religión, de raza o de todo aquello que supuestamente nos diferencia como personas, encontrás similitudes. A través de una experiencia cercana descubrís que la esencia del ser humano es buena, pero tienen más prensa los que hacen mal”.

Consultado por EL DIARIO sobre la posibilidad de poder viajar con poco dinero, puntualizó: “Siempre un mínimo tenés que tener. De todos modos, depende cuál sea tu objetivo final y si tenés tiempo físico de alcanzar ese destino final. Si podés parar en lugares y trabajar, si viajás con familia o estás solo y si podés tomar riesgos de pagar menos, pero sin la seguridad de un traslado tradicional, por ejemplo”.

Lo que sí recomendó ahorrar, utilizar los mismos equipos de viaje (no comprar en cada ocasión) y sobre todo “conseguir un contacto con un local”, alguien del lugar que pueda aconsejar.

En cuanto a mitos de viajes, por ejemplo, señaló que “a veces se dice que Africa es más barato que Europa y es mentira: en Europa podés comer cosas que venden en la calle, usar el transporte público, dormir por poca plata, mientras que en Africa necesitás sí o sí de guía”.