Escribe: Héctor Cavagliato
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Que el golf es una pasión que suele trascender los límites del placer para afrontar situaciones extremas del clima y pone a prueba el entusiasmo de su práctica lo da el hecho de que, con lluvia o con viento, los jugadores no saben de sacrificios.
Sin embargo, tampoco es cuestión de que se transforme en una penuria el tránsito de una cancha con esas condiciones.
Entonces, no extrañó que las inclemencias de la lluvia y el viento invitaran a la gran mayoría de los que habitualmente juegan los torneos a optar por la comodidad y el placer del refugio hogareño u optar por ver el Masters de Augusta por TV.
Tanto fue así que sólo 15 aficionados se anotaron para participar lo que debía ser el Torneo La Segunda Seguros y que fue postergado para una fecha próxima.
Hay situaciones especiales que, en otras condiciones, obligan a la suspensión: peligros de rayos de las tormentas eléctricas y la inundación de los greens que impidan el rodar de la pelota. Ninguno de esos factores imperaba el sábado.
Entonces, se improvisó un medal play con premios de la Comisión Directiva y estas fueron las posiciones de las nueve tarjetas presentadas:
Luis Aráoz 25 44 46 65
Jorge Giraudo 34 49 54 69
Francisco Chiaramello 17 45 42 70
Hugo Grenat 36 50 59 73
Darío Le Roux 14 47 42 74
Ignacio Vedelago 15 44 45 74
Omar Grenat 25 48 55 78
Dante Lanzillotta 15 45 50 80
Franco Amer 25 61 58 94
Sergio García en Augusta
El español Sergio García fue el ganador de la 81º edición del Masters de Augusta, en una agónica definición con el inglés Justin Rose, que luego de empatar en los 18 hoyos de ayer jugaron un hoyo más de desempate.
García se impuso en el playoff y sumó su primer major de su carrera profesional, curiosamente el mismo día en el recordado Severiano Ballesteros, leyenda del golf español, hubiera cumplido 60 años.
El chaqueño Emiliano Grillo fue el único argentino en acceder a los 72 hoyos, mientras que el cordobés Angel “Pato” Cabrera no pudo pasar el corte clasificatorio de los 36 hoyos.