Jorgelina Grassani integra, desde el lunes, la mesa directiva del gremio de los docentes de escuelas técnicas. Ernesto Suárez habló con EL DIARIO sobre la problemática del sector
Villa María tiene tres escuelas técnicas públicas y Villa Nueva una, lo que significa que hay una fuerte presencia de docentes representados por la Asociación de Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET), gremio creado hace unos 60 años por los “maestros de taller” de todo el país.
La regional Córdoba de AMET tiene, desde el lunes, a una villamariense que integra por primera vez la conducción provincial. Se trata de Jorgelina Grassani, docente del IPET 49 (Escuela del Trabajo).
“Es una militante con un gran compromiso”, valoró Ernesto Suárez, flamante secretario general del gremio en Córdoba, quien destacó que Grassani ocupa la Secretaría de la Mujer, “un área relativamente nueva” dentro de AMET.
Suárez viene trabajando desde hace décadas en el gremio, ocupando distintos cargos hasta que fue elegido como secretario general para el actual período.
Sobre el objetivo de su gestión dijo “que siempre es trabajar para mejorar la calidad de vida de los trabajadores, llevando servicios sociales, capacitación; lo que redunda en la calidad de enseñanza que reciben los estudiantes. No nos olvidemos que el objetivo de todo educador es el estudiante”.
Señaló que lamentablemente en Córdoba, “AMET no participa en la negociación salarial”. “Igual, eso no impide que sigamos trabajando como gremio”.
El sindicato tiene en la provincia unos 2.500 trabajadores afiliados, provenientes de las casi 250 escuelas técnicas.
A la hora de referirse a los desafíos específicos, dijo que “hay una problemática general de la educación, y dentro de ella, en las escuelas técnicas de Córdoba estamos preocupados principalmente por la seria disminución de la matrícula. Vamos a trabajar seriamente, con estadísticas en la mano y con una mirada autocrítica, para tratar de revertirlo”, concluyó.
