En el Sindicato de la Alimentación no ocultan su preocupación porque en Nestlé de Villa Nueva, están trabajando a un cuarto del potencial. Para aclarar el panorama y descartar rumores, citaron a las autoridades al Ministerio de Trabajo
La planta de leche en polvo ubicada sobre la ruta 2, en Villa Nueva, está procesando 250 mil litros, cuando hace unos meses secaba -para hacer leche en polvo-, un millón de litros. Este dato lo confirmó Fernando Páez, titular del Sindicato de Trabajadores de la Alimentación (STIA) de esa ciudad.
“Estamos preocupados. Nosotros venimos dialogando permanentemente con los jerárquicos de la planta de Nestlé, tanto con el gerente como con la encargada de Recursos Humanos”, indicó.
Pese al diálogo y al cumplimiento de Nestlé de todas las obligaciones laborales, comenzaron a circular rumores que llegaron a oídos de los trabajadores generando preocupación por el futuro laboral.
“Hablan de que podrían llevarse la línea de envasado de los tarros de leche para exportar, que son los de 1,8 y 2,5 kilos. También dicen que se llevarían a Centroamérica la línea de 800 gramos, que es la que se vende en el mercado interno y el sector donde se preparan las cajas de leche en polvo”, señaló Páez. Cabe señalar que el sector envases es el que más mano de obra genera. “De todas maneras, es obvio que si se concreta el traslado de la línea de envasos, nos vamos a enterar. Eso todavía no ocurrió”, dijo, ante una pregunta de este medio.
“Nosotros queremos estar alertos y llevar tranquilidad. Es por eso que, tras hablarlo el martes a la noche en la Comisión Directiva, decidimos pedir una audiencia en el Ministerio de Trabajo con la finalidad de citar en un ámbito formal a los jerárquicos de la planta, para que se aclaren todas las versiones”, indicó Páez. La audiencia será el 18 de marzo.
Complicado
La preocupación del gremio no pasa sólo por los rumores. “Es cierto todo lo que se viene hablando de la lechería”, apuntó. “Hay que decir que la leche en polvo valía en el mercado internacional 3.300 dólares la tonelada y hoy con suerte la pueden vender a 1.800 dólares. Es por eso que el gerente nos confirmó que el primer semestre del año será complicado para el sector”, apuntó Páez.
“En definitiva, con la audiencia en el Ministerio estamos abriendo el paraguas: no queremos que nos pase lo que ocurrió con Santa Clara”, dijo, recordando que la otra planta importante de alimentos de Villa Nueva venía trabajando con 77 empleados y actualmente tienen 33. “Por suerte, los que se fueron con retiros voluntarios de Santa Clara se fueron con buenas indemnizaciones y hay que decir que ahora, están trabajando bastante bien, puntualmente, en lo que hace a las bebidas gaseosas en lata y energizantes”, concluyó.