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«El programa es un facilitador de muchas cosas»

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«El programa es un facilitador de muchas cosas»
“Soy un busca”, confesó entre sonrisas y lágrimas contenidas de emoción el miércoles pasado en una cena organizada con los sponsors que acompañan el proyecto (foto Gabriel Hernández)

El próximo 25 de Mayo partirá al Viejo Continente para entrevistarse con villamarienses distribuidos en distintos países. Será su sexta temporada en forma consecutiva

“Soy un busca”, confesó entre sonrisas y lágrimas contenidas de emoción el miércoles pasado en una cena organizada con los sponsors que acompañan el proyecto (foto Gabriel Hernández)
“Soy un busca”, confesó entre sonrisas y lágrimas contenidas de emoción el miércoles pasado en una cena organizada con los sponsors que acompañan el proyecto (foto Gabriel Hernández)

Por sexto año consecutivo, Richard Kamienski viajará a Europa en busca de villamarienses diseminados en distintos puntos del mapa europeo para su programa insignia: “De aquí para allá”, que se emite por Mirate.

El próximo 25 de mayo, casualmente el Día de la Patria, el conductor televisivo partirá para tomar contacto con la diáspora local en España, el País Vasco, Italia, Polonia y, por primera vez, a Estambul, Turquía para visitar a un villamariense que trabaja en un café frente a la afamada plaza Taksim.

Entre la veintena de entrevistas programadas se incluirá además al doctor Olavide quien desdobla su tiempo entre su encumbrada carrera académica y el apasionamiento del periodismo deportivo en Pamplona y a un coterráneo que reside desde hace 50 años en Roma.

Como un “plus”, se reunirá con varios exentrevistados (en Madrid, Barcelona y París), cuyas vidas han cambiado de parabienes: una soltera que ahora está en pareja y embarazada y una docente que se ha convertido en vicerrectora, por nombrar dos casos.

Por supuesto, también pasará unos días en Polonia, la tierra de su célebre bisabuelo, Henryk Michal Kamienski, a quien lo recordarán en breve mediante un certamen bibliográfico en Varsovia, como se desarrolla todos los años.

 

Dar trabajo a otro villamariense

“El programa ha sido un facilitador de cosas”, señala Richard a EL DIARIO, al momento de rememorar las cinco temporadas del ciclo. “Yo lo había pensado como algo con sentido turístico o de encuentro con la gente de acá, pero nunca pensé que llegaría a ser lo que se convirtió”, apuntó.

“Gracias al programa”, como le gusta remarcar, un joven tenista local está entrenando bajo el mando de Alex Corretja en España o dos descendientes polacos han logrado descubrir sus raíces gracias al traductor que recibe y acompaña a Kamienski en sus respectivos viajes.

O, como prueba de las ligazones que se conservan a pesar de las distancias con el terruño propio, dos personas lograron conseguir trabajo de la mano de otros villamarienses. “Una odontóloga había quedado sin laburo de un día para el otro en Madrid. Me acordé de un amigo que tenía una clínica en Barcelona. A los tres días, la chica entró a trabajar allí. Lo mismo me pasó con un mozo. Conocía a alguien en Sevilla que me dijo que necesitaba un camarero con urgencia”. Todo por haber develado la contraseña común que une a los nacidos en estas latitudes.

 

Casi un cuarto de siglo

“Yo soy un busca”, admitió sin tapujos, en la cena organizada ante los sponsors del viaje a Europa. Kamienski, micrófono en mano y lágrimas contenidas en los ojos, agradecía a los invitados el miércoles pasado, en un agasajo realizado en el Sport Social Club. “Más que clientes, ustedes son mis amigos”, añadió.

La cita, a la cual asistió el intendente Martín Gill, también sirvió como repaso de sus casi 25 años de televisión, cuando la hiperinflación -según contó-, lo empujó a armar una criatura inclasificable, pero todavía recordable, llamada “Hora Clavo” en el viejo Canal 2, que luego tendría su extensión a Canal 12 de Córdoba. Al poco tiempo, emergería “De aquí para allá”, a modo de suplir el vacío de programación en época estival y para llenar el plato de comida de su propia familia.

En 2011 comenzaría a cristalizar la ambiciosa aventura transoceánica. A la par de entrevistar a villamarienses, el animador se dio el lujo de charlar con Paul Dorochenko (preparador físico de Federer) y Darío Felman (campeón mundial con Boca). Ahora hará lo propio con Franco Simone, a quien conoce de su época de productor musical, en Florencia.

“La gente se adueña de una partecita del programa y quiere que aparezca tal pariente que está viviendo en algún país de Europa. O te invita a casamientos que se hacen allá. Además, se ha creado en estos años, un archivo muy importante. Incluso, tenemos entrevistas con personas que lamentablemente dejaron de existir como el Rolo Ghezzi, el Chino Morsila o Pablo González”, recordó.

Del mismo modo, precisó que a través de su proyecto televisivo, una universidad polaca desea concretar un intercambio con la UNVM y la localidad de Ruda Huta, de donde era oriundo de bisabuelo, quiere hacer un hermanamiento con Villa María.

Como meta para el próximo año se planteó llegar a China, donde ya conoce a varios representantes locales afincados en dichas tierras orientales.

 

Anécdotas de colección

Como era de esperarse, el anecdotario acumulado en cinco años de viajes es más que ostensible. Dado su perfil histriónico, Richard potencia sus recuerdos de un modo más que particular.

Recuerda a un personaje de plaza en Barcelona, ataviado como un pajarraco inmenso, que lo abraza y le dice al oído: “Richard, te conozco desde hace años, soy de Dalmacio Vélez”. O de un agente de la línea aérea Lufthansa, quien lo auxilia ante un alemán cerrado en el aeropuerto de Frankfurt, tras la siguiente acotación: “No te preocupes, soy de La Carlota”.

Una de las más memorables, sucede en un café de Milán, con Guillermo Domenech de testigo. Se acerca un mozo, nacido en Ucacha, quien reconoció la tonada cordobesa de los clientes de inmediato. “Yo escuchaba a un tipo en una radio de Villa María que hablaba de Chac y de Creo”, comenta el camarero. “¿Sabés quién era ese tipo?”, le contesta Richard. “Era yo”.

 

Por el éter

En dos oportunidades, Kamienski tuvo sendos “copilotos” de lujo. En uno de los periplos lo acompañó Gabriel Hernández (“uno de los mejores videastas de nuestra zona”, según el conductor), y el músico español Angel Saguar, quien también estuvo viviendo en nuestro país.

Desde Europa, Richard también colaboró con radios villamarienses, como FM Centro (donde realizó tres jornadas de cinco horas consecutivas desde Polonia), La Show y radio Regional, con la cual logró hacer una hora por día durante 30 días seguidos.

También envió notas periodísticas para EL DIARIO.