Aves de diversas especies iban ocultas en jaulas que a su vez estaban dentro de un bolso de gran tamaño. El dueño del equipaje no pudo acreditar documentación que lo habilitara a su legal tenencia y transporte
Zorzales negros, jilgueros, reinas mora, soldaditos, siete colores, brasitas, diucas, viravira y piquitos de oro (unos 130 ejemplares, sumando las especies) fueron rescatados ayer vivitos y trinando de la bodega de un colectivo de larga distancia que fue interceptado por efectivos del destacamento de Gendarmería Nacional ubicado en Villa María.
Los uniformados detuvieron el andar del interno 3.431 de la empresa Urquiza, que iba de Córdoba a La Plata, en la estación del peaje de James Craik.
Cuando los efectivos requisaron la bodega de la unidad de transporte público de pasajeros advirtieron que en el interior de la bodega había un bolso negro de gran tamaño (número de ticket A-04561309), que por sus características y peso les llamó la atención. Convocaron al propietario de dicho bolso, quien fue identificado como Marcelo Alejandro Medina, argentino y domiciliado en San Antonio de Arredondo (Valle de Punilla, provincia de Córdoba) y le pidieron que lo abriera.
Tras ello, constataron que el bolso contenía pequeñas jaulas con las mencionadas aves y que el responsable del equipaje no podía acreditar “ninguna documentación que avalara su legal tenencia y transporte”, por lo que estaba en flagrante infracción a la Ley 22.421 de Conservación de la Fauna y a la Ley provincial 7.343 de Principios Rectores para la Preservación, Conservación, Defensa y Mejoramiento del Ambiente.
En consecuencia, los gendarmes dieron inmediata intervención en el caso a la Secretaría de Medio Ambiente de Córdoba, quienes dispusieron el decomiso y labraron actuaciones de rigor. Las especies vivas fueron puestas a disposición de las autoridades provinciales antes mencionadas.