
Ayer fueron presentadas las nuevas instalaciones. Los servicios se integrarán al centro de diagnóstico por imágenes y se complementarán con la Clínica de la Familia

El lunes comenzará a atender el Centro Médico Roentgen, en el flamante edificio inaugurado en la segunda cuadra de calle 9 de Julio.
Según se definió ayer en rueda de prensa, se trata de un “centro de medicina ambulatoria de alta complejidad” que se integra al existente centro de diagnóstico por imágenes de la misma empresa y que complementará sus servicios con una articulación con la Clínica de la Familia.
Estará abierto al público de lunes a viernes, de 7 a 20, procurando resolver en una sola estadía en el centro las distintas prácticas.
Los servicios previstos son los de Anestesia, Cardiología, Cirugía General, Clínica Médica, Dermatología, Endocrinología, Endoscopía, Flebología, Infectología, Neurología, Pediatría, Reumatología, Traumatología, Urología, Anatomía Patológica, Cirugía de Tórax, Cirugía de Cabeza y Cuello, y Cirugía Plástica y Reconstructiva. La coordinación del centro está a cargo de Darío Quinodoz, al frente de un equipo de 30 profesionales.

En realidad, la inauguración de ayer fue parcial, ya que de las siete plantas del complejo, quedaron en obra los tres últimos pisos, donde se habilitarán en meses venideros más consultorios, la Cirugía y sala para médicos y un auditorio.
Ampliación de servicios
El dueño de Roentgen, Osvaldo Paesani, calificó al acontecimiento como “una ampliación” de los servicios que presta su compañía de salud, para “llenar un vacío que había en a ciudad” respecto a la atención ambulatoria integral. En compañía de su hija María Julia y de Quinodoz, respondieron las consultas de una numerosa comitiva de periodistas de nuestro medio horas antes del acto inaugural.
A manera de ejemplo, se indicó que “la medicina ambulatoria permite que se opere a un paciente y se vaya el mismo día a la casa”. “No tenemos lujos, pero sí confort”, destacó Paesani, quien si bien declinó informar la inversión total del nuevo centro sanitario, dijo que sólo en tecnología se lleva invertida la suma de un millón de dólares en el edificio de 9 de Julio 141.
Cuando se le preguntó cómo se entiende que -en un ramo donde los empresarios de la salud permanentemente se quejan de los bajos ingresos y del peligro de cierre de las clínicas- Roentgen encare tan importante inversión, Paesani respondió que “somos trapecistas sin red, tenemos una rentabilidad mínima, todo lo que ganamos lo reinvertimos en la empresa, y aunque no nadamos en la abundancia, no nos ha ido mal”. Asimismo, resaltó que el emprendimiento que se pone en marcha incorporó una veintena de personas, “con empleos en blanco, como corresponde”.
En los primeros tiempos será limitada la atención a obras sociales, ya que la normativa nacional exige que los centros de salud estén en completo funcionamiento para formalizar convenios. No obstante, aquellos facultativos que personalmente vengan manteniendo convenios con obras sociales tales como el PAMI, podrán atender a sus pacientes por esa vía.
Por otra parte, se aclaró que si bien existe una alianza con el sanatorio del Sindicato de Camioneros, la internación en un tercer nivel de complejidad será libre para cualquier clínica, a elección del paciente.

Inauguración
En la tarde noche de ayer se efectuó la inauguración con un acto oficial que se desplegó por la calle 9 de julio.
Mientras la gente llegaba, una banda musical ambientalizaba el ambiente. Estaban presentes empleados de la instituciones, médicos de la ciudad, autoridades, vecinos y familiares.
La ceremonia formal comenzó cerca de las 19.45 con el cantante local Pablo Cordero, interpretando el Himno Nacional.
Posteriormente, frente a un multitudinario público, María Julia Paesani, brindó una palabras en agradecimiento al trabajo realizado.
Comenzó hablando de los cambios, que muchas veces significan “una mirada optimista hacia el futuro”.
Dijo que en momentos de transición los sucesos no sólo “son diferentes sino también mejores”.
También hizo referencia al trabajo en conjunto de todo el equipo de Roentgen. Habló de los profesionales y dijo que “es un orgullo” porque “se sumaron con una fe ciega”.
Además señaló que este proyecto los involucra con compromiso.
Entre la emoción recordó a su abuelo fallecido, quien fue fundador de la institución, como así también a su abuela.
Contó que el proyecto fue creciendo poco a poco y que hoy ya se encuentran pensando en la segunda etapa de este centro médico.
En la oportunidad, el director Paesani también dirigió unas palabras a todo el público presente y remarcó que el municipio junto a las demás instituciones de la ciudad “siempre nos acompañaron”.
Confesó que para evitar emocionarse, plasmo sus pensamientos en un escrito. En este sentido, afirmó que forma parte de un proyecto de “beneficio para la sociedad”.
También agregó: “Es un compromiso con la realidad que nos ocupa y nos preocupa”.
Además destacó el trabajo en conjunto con la Universidad Nacional de Córdoba y la Universidad Nacional de Villa María (UNVM) ya que brindan “el conocimiento e información combustible indispensable para la investigación científica.
Estuvo presente el intendente Martín Gill, la legisladora Nora Bedano, el director del Hospital Regional Pasteur, Luis Seggiario, el rector de la UNVM, Luis Negretti, autoridades municipales, empresarios, empleados y vecinos.