La ingesta excesiva de bebidas alcohólicas puede ocasionar daños a la salud. La consigna “alcohol cero” debe ser cumplida por quienes manejen vehículos para evitar poner en riesgo su vida y la de terceros
Con el propósito de cuidar la salud y proteger la vida de la población, la cartera sanitaria nacional recomendó el consumo prudente y responsable de bebidas con alcohol durante las fiestas de fin de año, particularmente de quienes tengan que conducir.
Para ellos, la consigna es lisa y llanamente «alcohol cero» y tiene como objetivo proteger tanto su vida como la de terceros.
Por eso, si una persona ha tomado alcohol, es recomendable que los demás le pidan que no maneje.
Por otro lado, si alguien bebe de más, se debe acompañar a esa persona, llevarla a un lugar tranquilo y ventilado, recostarla de costado para que no se ahogue en caso de tener vómitos, aflojarle la ropa, abrigarla, ofrecerle agua y no permitirle manejar ni irse sola.
Los niños y las mujeres en búsqueda de embarazo, embarazadas o en período de lactancia no deben consumir alcohol, como así tampoco las personas que lo tienen contraindicado por enfermedad o uso de medicamentos.
Las bebidas con alcohol son sustancias psicoactivas que generan cambios en el ánimo, la memoria, el pensamiento, las sensaciones y la voluntad.
Sus efectos dependen del grado de alcohol puro que contenga la bebida, si se ingirieron previamente alimentos o no y el contexto en el cual se bebió.
También intervienen en los efectos las características corporales del consumidor; la existencia de enfermedades y la eventual mezcla con otras bebidas alcohólicas y/o sustancias.
En caso de que se produzcan incidentes debido a un consumo excesivo de alcohol, es recomendable asistir inmediatamente al centro de salud más cercano, informaron las autoridades.