San Lorenzo volvió a derrotar a Sportivo Playosa y le ahogó el sueño de revertir la serie. Los de Las Perdices ganaron 2-1, avanzaron merecidamente a la final y frente al Deportivo Argentino irán por la gloria que se les viene escapando desde hace 32 años
Escribe: Federico Gazzoli
Fotos: Osvaldo Carballo
De “Santo” no tuvo nada; aprovechó los errores del rival, golpeó en los momentos oportunos y terminó festejando su pasaje a la final de la Liga Villamariense, en una clasificación que le dará la posibilidad de buscar el campeonato luego de unos eternos 32 años. Así vivió San Lorenzo de Las Perdices una de las jornadas más importantes de su historia, derrotando justamente 2-1 a un Sportivo Playosa que, a pesar de ser el gran necesitado de la tarde, falló cuando tuvo la oportunidad de ponerse en ventaja y siempre estuvo lejos de lograr la hazaña de revertir el 3-0 de la ida.
Gracias a la cómoda diferencia lograda 15 días atrás en su reducto, el elenco perdiceño salió a disputar la revancha de la semifinal con la lógica tranquilidad que le otorgaba estar tres tantos arriba en el tanteador. Fue así que los dirigidos por Heraldo Pereno como primer premisa intentaron mantenerse ordenados en defensa y en el mediocampo, para luego apostar al contragolpe.
Mientras tanto, los de Germán Vicario sólo eran profundos cuando contaban con alguna pelota parada cerca del área rival, pero entre el arquero Sami Suárez y sus defensores se las arreglaron para despejar sin complicaciones cualquier tipo de peligro.
En ese contexto la mayor parte de la acción se disputó en el sector medio del terreno de juego, sector en el que se hizo fuerte el doble cinco del “Santo”, compuesto por Ellena y Mansilla, con un gran despliegue y una innumerable cantidad de pelotas recuperadas.
Así las cosas, San Lorenzo tuvo la primera chance neta de gol. Fue a los 11’, por intermedio de un violento tiro libre ejecutado desde larga distancia por José Cesarini y desviado hacia el córner por Fabricio Garetto.
Los de La Playosa contestaron 5’ más tarde, a través de un tiro libre realizado por Jorge Servetti que Suárez despejó volando espectacularmente contra su palo derecho y cuando parecía que la pelota se le metía en el ángulo.
Nuevamente en una acción a balón detenido, el “Albo” avisó sobre la media hora de acción; Servetti realizó un córner desde la derecha y en el área chica Roberto Aimar anticipó de cabeza una pelota que se fue, por muy poco, arriba del travesaño.
Todo era muy parejo, hasta que a los 43’ en una jugada que parecía aislada y sin demasiada relevancia, el combinado “azulgrana” dio el primer golpe de la tarde: el marcador de punta José Cesarini pasó la mitad de la cancha con pelota dominada, le metió un caño a Juan Tissera y, desde aproximadamente 25 metros, sacó un zurdazo rasante y envenenado que fue picando hasta las cercanías de un Garetto que, yendo a cubrir el primer palo y cuando quiso frenarse no pudo hacer pie, intentó manotear un balón que se le escurrió de las manos y se convirtió en el 1-0 para los perdiceños.
Un baldazo de agua fría, como la tarde de Arroyo Cabral, para las aspiraciones de un Sportivo Playosa que sin embargo se repuso tan solo tres minutos después. En un tiro libre impulsado por Jorge Servetti desde la derecha, por el segundo palo apareció Diego Gabetta para definir con su botín derecho y puso el empate transitorio.
La acción de la primera parte finalizó igualada en un tanto y para la segunda parte, si quería seguir soñando con dar vuelta la serie, los de La Playosa deberían salir a quemar las naves desde un comienzo porque les quedaban tan solo 45 minutos para convertir tres goles que llevaran la definición de la serie a una definición por penales.
Fue por esa necesidad que el “Albo” salió decidido a jugar el segundo tiempo y casi logra ponerse en ventaja por primera vez en el partido cuando, a los 8’, Servetti habilitó a Gabetta y entrando al área por la derecha el experimentado mediocampista metió un derechazo que se fue por encima del larguero.
El encuentro siguió siendo parejo, con una pelota que la mayor parte del tiempo estuvo en el mediocampo, pero a los 14’ Sportivo tuvo una chance inmejorable de pasar a dominar en el tanteador. En una acción dudosa, José Berterame y José Moyano pelearon cuerpo a cuerpo dentro del área de San Lorenzo, el referí interpretó que el defensor “Santo” tocó el balón con la mano y pitó penal.
El habilidoso Servetti se paró frente al esférico, tomó ventaja y metió un derechazo al medio que reventó el travesaño del arco de Suárez.
Definitivamente parecía que los astros no estaban alineados para que Playosa soñara con la final y ese anhelo terminó de derribarse a los 17’; desde la derecha Juan Medina habilitó al ingresado Jonathan Silva, quien se coló entre los centrales rivales y entrando al área por el centro definió sutilmente sobre la salida de Garetto para estampar el 2 a 1.
Más allá de que el rival nunca bajó los brazos y luchó hasta el cansancio, en ese momento del partido los de Las Perdices comenzaron a sentirse más finalistas que nunca.
Pasaron los minutos, los dos tuvieron algunas chances mínimas de volver a anotar y con el pitazo final de Cristian Atorri se desató la fiesta perdiceña. Es que, luego de más de tres décadas, San Lorenzo intentará sumar otro título a sus vitrinas.
El “Santo” se metió entre los ocho mejores en el última plaza disponible. Eliminó al siempre candidato Alumni, dejó en el camino a un duro Sportivo Playosa y ahora definirá el Torneo Apertura mano a mano con Deportivo Argentino.
Párrafo aparte para el entrenador Heraldo Pereno, quien tras la partida de Mariano Dulla agarró a un equipo que estaba complicado en sus chances para clasificar y pudo depositarlo en la final.