Tres hojas de lechuga, medio tomate, una verdadera “injusticia”. Si comer sano es sinónimo de comer feo y la única manera de mantenerse en línea es quedarse con hambre, el camino a la gordura o a una mala alimentación está garantizado.

Las nuevas tendencias en materia de nutrición: comer más y mantener la línea comiendo mejor.

Llegó el fin de las dietas restrictivas, la dictadura del lápiz rojo con los no puedo se empieza a abandonar, acorralar el menú diario a unos pocos alimentos no es eficaz al momento de sostener una buena alimentación más ligada a la calidad de vida y a la salud que a las variantes de la aguja de la balanza. Podemos comer más de lo que comemos sin engordar, la clave está en el tipo de alimentos que ingerimos.

Aconsejar a comer más es más efectivo que aconsejar comer menos. Los mensajes positivos acerca de todo lo que se puede comer tienen mejores resultados que los mensajes basados en los no. Ya no se habla de dieta sino de plan de alimentación. Y no hay más alimentos prohibidos sino convenientes o inconvenientes. La prohibición genera tentación, por eso nada mejor que para aquel que adora los dulces comer una golosina por día.

Consejo para comer más y mejor

• Aumentar el consumo de alimentos ricos en fibras y que demanden mayor tiempo de masticación. Realizar entre cuatro y seis comidas al día, comer despacio y beber como mínimo dos litros de líquido por día.

Las dietas basadas en los no se puede y en el hambre pasaron de moda. La clave es saber elegir la comida.

Hasta la próxima…