
En el clásico de la Zona Norte, Silvio Pellico y Unión Social empataron 1-1 y cerraron un domingo sin cumplir sus objetivos. El Canario no se aseguró la clasificación, mientras que los de Alto Alegre quedaron sin chances de avanzar a cuartos de final

Escribe: Federico Gazzoli
Foto: Victoria Araujo
Como suele decirse habitualmente en la jerga futbolera, a veces hay puntos que restan y esa frase define a la perfección lo que sucedió ayer en el clásico entre Silvio Pellico y Unión Social, que finalizó igualado en un tanto. Es que el Canario, por segunda fecha consecutiva, no pudo asegurar su pasaje a los cuartos de final y ya no depende más de sí mismo para lograrlo, mientras que los de Alto Alegre dejaron pasar la última chance de pelear por la clasificación hasta la última fecha.
Con todo lo que había en juego, el partido comenzó siendo tan parejo como mal jugado. En los minutos iniciales, quizás por el famoso “miedo a perder”, los rivales se estudiaron sin provocarse mutuamente y así la pelota, que nunca fue bien tratada, deambuló por la mitad de la cancha ante la ausencia de alguien que la pusiera contra el piso parta tratar de dar dos o tres pases seguidos.
Así el juego se tornó muy tedioso, aburrido y cortado por las constantes infracciones que cometieron ambos equipos.
Tan aburrida fue esa parte del cotejo que para observar la primera situación de riesgo el local tuvo que acudir a una jugada con pelota detenida cuando el reloj marcaba 23’ y Matías Garofani mandó al córner un tiro libre ejecutado por Alfio Demarchi. Parecía una jugada aislada, pero era el presagio desde lo que iba a suceder 6’ más tarde.
En una jugada similar en la que el Chaca remató desde la derecha, Garofani parecía tener controlada la situación pero la pelota le escapó de las manos dentro del área chica y allí apareció el defensor Facundo Quiroga para empujar el balón y anotar el 1 a 0.
El gol le dio al local el triunfo parcial que necesitaba para comenzar a pensar en los cuartos de final, pero al mismo tiempo generó que se relajara y permitiera que el CUS se hiciera de la pelota y empezara a adelantarse en el terreno de juego.
Fue así como a los 37’ Braian Verón envió un centro hacia el área rival, Ezequiel Oliva rechazó corto y en rebote Demarchi le cometió infracción a Molina, por lo que el árbitro Emanuel Murúa pitó penal para la visita. Guillermo Heredia se hizo cargo de la pena máxima y quiso asegurar definiendo al medio del arco, pero el uno Canario alcanzó a cachetear el esférico mientras volaba hacia su derecha y así le ahogó el grito de gol al Memo; en el rebote el delantero llegó incómodo, definió defectuosamente y Oliva dominó abajo.
Un duro golpe a la ilusiones del equipo conducido por Marcelo Zabala, que a pesar de eso siguió yendo en búsqueda del empate. A poco de cumplirse el tiempo reglamentario, Heredia se metió al área por la izquierda, quedó cara a cara con el arquero y tocó hacia la medialuna, donde Sebastián Godoy remató de primera y con su botín derecho un balón que reventó el travesaño y picó sobre la línea antes de que la defensa rival local despejara bien lejos.
En la parte complementaria, a sabiendas de que se estaba quedando afuera, Unión Social obligó de arranque; desde la izquierda, el ingresado Natanael Casale definió cruzado y defectuosamente, pero por el segundo palo apareció Nicolás Rubiano para corregir la trayectoria del balón y meter un derechazo que se fue alto.
La desesperación de los de Alto Alegre por llegar al empate los llevó a dejar muchos espacios libres en el fondo y así Silvio Pellico apostó a salir jugando rápidamente de contra.
A través de esa vía, Esteban Oliva ganó por la derecha, llegó al fondo y metió centro rasante hacia el área chica, donde a Martín Ledesma la pelota le pasó por abajó del botín cuando intentó empujar hacia el gol.
Volvió a intentar Demarchi con un nuevo tiro libre cuando se jugaban 17’, pero esta vez la pelota se fue por encima del larguero.
Sobre la media hora de juego, tras una buena maniobra de Esteban Oliva por el sector izquierdo, por el sector derecho del área apareció Iván Moyano cara a cara con el arquero y definió a las manos del uno.
Si bien las intenciones de Unión Social para lograr la igualdad se diluían por la falta de claridad a la hora de definir, cuando el reloj marcaba 37’ llegó el empate. Un centro llovió sobre el área local, Ramallo la bajó de cabeza hacia el medio y en la medialuna apareció Verón para meter un soberbio derechazo que se clavó contra el palo izquierdo de un estático Ezequiel Oliva.
Fue un puñal contra los sueños Canarios de clasificación y un cuota de esperanza al anhelo de sobrevivencia del CUS.
Unión Social siguió insistiendo pero no logró concretar debido a su imprecisión a la hora de definir, mientras que Silvio Pellico también tuvo sus chances de contraataque, pero se vio muy perjudicado por la decisión arbitral de no cobrarle, por lo menos, dos claros penales.
Antes del final, Garofani despejó con los puños un tiro libre de Demarchi y un buen remate de Marcos Flores.
El encuentro finalizó 1 a 1 y así se repartieron un punto de esos que restan mucho más de los que suman. El Canario deberá viajar a La Playosa para luchar por una clasificación que, seguramente, no le será nada fácil porque en frente tendrá a un Albo que también buscará el triunfo para pasar de ronda.
Por su parte, Unión Social, que realizó una muy buena primera rueda, en la segunda mermó notablemente su rendimiento y ayer se despidió del campeonato.
El árbitro
Emanuel Murúa
Mal arbitraje. En el primer tiempo tuvo más aciertos que errores, pero en la parte complementaria su actuación decayó notablemente. En esa parte del partido se lo vio muy dubitativo, fallando en jugadas divididas, ignorando infracciones, ahorrándose varias amarillas y perjudicando notablemente al local al no cobrarle, por lo menos, dos claros penales.
La figura
Esteban Oliva
Si bien no hubo un jugador que sobresaliera demasiado sobre el resto, el habilidoso mediocampista Canario se destacó por el constante desequilibrio ofensivo que aportó por ambas bandas.