
El agente inmobiliario Marcelo Caballero, nombrado por vecinos de un complejo de viviendas en el que las aguas servidas generan riesgos de infección, aclaró que él también colabora activamente para que el problema se resuelva

“Me siento agraviado y encima por algo que no tengo nada que ver ya que simplemente soy un cobrador de alquileres”, expresó ayer Marcelo Caballero, el corredor inmobiliario que fue señalado por inquilinos a través de una denuncia por problemas edilicios existentes en un complejo de barrio Lamadrid.
Vale recordar que el grupo vecinal integrado por Micaela Sauce, Pablo Benavídez, Belén A., Matías A., Janes Seixas y Roque Alberto Esquivel, habían mencionado a Caballero y a los dueños de los departamentos del Complejo Alumni en el marco de un reclamo por el desborde de líquidos cloacales en el edificio, que publicamos en nuestra edición de ayer.
Según precisaron, la cámara séptica del inmueble, ubicado en Ituzaingó 460, se encontraba abierta y las aguas servidas habían ganado espacios del lugar por donde atraviesan los frentistas y también los patios y los baños de las unidades habitacionales.
“El problema existe y ya se ha intentado repararlo en cuatro oportunidades, incluso se levantó la vereda para arreglar. A mi cargo (en cuestión de cobro de alquileres) solamente tengo tres departamentos, de los cuales uno está desocupado”, advirtió Caballero en diálogo con EL DIARIO.
“Soy el primero en tratar de colaborar para que esta situación se resuelva, pero también está la voluntad de los dueños para aportar a la solución. Ellos tienen gran responsabilidad en esto, no yo que solamente me encargo de efectuar la cobranza”, insistió el entrevistado.
Según pudo conocerse, cuatro de las viviendas pertenecen al Club Alumni y el resto a propietarios privados.
El espacio edilicio no tiene consorcio conformado y por ello no se cobran expensas a los moradores ya que no existe la figura de administrador.
“Considero que los dueños deberían juntarse, conformar un consorcio y afrontar las cosas que van sucediendo en el lugar”, precisó Caballero.
Por otra parte el agente inmobiliario admitió que algunos inquilinos habían ido a la Defensoría del Pueblo a efectuar reclamos, obtuvieron turnos para entrevistarse con la auditora general, pero finalmente no asistieron al encuentro.
Para fundamentar sus dichos, Caballero presentó ante el cronista la documentación que avala lo que argumenta.
Cabe señalar que durante la jornada de ayer hubo avances respecto al arreglo de la cámara séptica, la principal demanda que impulsaban los frentistas.
“Yo solo tengo ánimo de colaborar y termino en algo que no tengo nada que ver. Además de sentirme mal personalmente afecta mi labor profesional y eso me parece injusto”, concluyó el titular de la inmobiliaria.