Laura Maciel, titular del Registro Civil, aseguró que son muchos los casos desde que rige la nueva normativa, que ahora protege y honra más a la mujer en caso de que aparezca el padre de su hijo
A partir de que desde el 1 de agosto rige el nuevo Código Civil y Comercial, en el Registro Civil de la ciudad “ha habido un impacto fuerte” en el Area de Reconocimientos.
Básicamente, explicó Laura Maciel, la jefa de esa dependencia, se trata de que “hay muchas mamás que van a inscribir solas a sus hijos, sin sus parejas, maridos o lo que sea”, pero a través de la nueva normativa, “ha habido un cambio de paradigma” cuando posteriormente aparece el padre a reconocer a ese hijo.
“Reconocimientos es un área que tiene mucho movimiento porque hay muchas relaciones de parejas no regulares y son en esos casos donde se plantean esa clases de conflictos”, resaltó Maciel para posteriormente detallar que “antes venía la persona, reconocía al hijo, y generalmente la mamá se enteraba cuando venía a hacer un cambio en la actualización o en la dirección de los documentos del hijo”.
En cambio, a partir del 1 de agosto, “cuando comparece el papá, si bien se toma el reconocimiento y se hace la notación marginal, no hay variación del apellido hasta tanto la madre no es notificada y se tienen que poner de acuerdo, en el caso de que sea el primer hijo, respecto del orden y la cantidad de los apellidos”.
Para pasar en limpio, “ese ha sido el gran cambio en el Registro Civil desde la implementación del Nuevo Código, porque creo que ha ubicado a la mujer en otro lugar”, consideró, y justificó: “Antes era como que aparecía alguien que hacía años no se había hecho cargo de su hijo y de pronto la madre era desplazada, y el chico también, de su apellido y del vínculo con el que se había identificado socialmente, y es un gran impacto sobre todo cuando los chicos ya tienen vida escolar y demás, y sin ningún tipo de aviso ni nada, aparecía el padre y al chico le cambiaba la identidad, lo cual era muy fuerte y muy desaprensivo del rol de la madre, que generalmente había afrontado la situación sola”.
Maciel reiteró que estos casos son muy comunes y se dan en gran número. En cuanto a los pasos a seguir una vez que aparece el padre, describió que “primero tenemos que cotejar el acta porque si pretende ser el padre del hijo tendrá que hacerlo por vía judicial o una impugnación de paternidad, luego tiene que acreditar su identidad, se llena un libro de reconocimiento que son actas tan solemnes y rigurosas como un acta de nacimiento o defunción, y se les informan las condiciones que plantea el nuevo Código Civil”, pero, sobre todo, “se le piden los datos más actualizados de la mamá, porque a veces son reconocimientos de un bebé de apenas meses, pero pasa también que vienen a reconocer un hijo que ya es adolescente o incluso mayor de edad, es algo común”.
La funcionaria diferenció los casos de Reconocimiento de los matrimonios al momento de elegir el apellido del niño. “En el caso de los matrimonios, cuando no hay acuerdo respecto a la cantidad y el orden de los apellidos del primer hijo, se hace un sorteo, que lo hacemos nosotros, pero no es muy común, hasta el momento no nos ha pasado en lo que va de vigencia del Código de tener que sortear, siempre vienen con algo ya preacordado; pero esa opción de sortear, en el caso de los reconocimientos no existe, se protege a la mamá.
Las uniones convivenciales solamente se pueden anotar en la Dirección General del Registro Civil, ubicado en Córdoba capital, a donde todos los interesados de la provincia deben dirigirse con dos testigos con los elementos documentales que prueben una convivencia de dos años o más.