Escribe Federico Gazzoli
El último subcampeón del fútbol local, Unión Central de Villa María, viajó hasta Ticino para verse las caras con un Atlético de esa localidad que tenía el fuerte atractivo de contar con el debut del experimentado Adrián “Máquina” Giampetri, un experimentado futbolista que supo jugar en Primera división, y el retorno del brillante Ayrton Páez tras su paso por Talleres de Córdoba.
En ese contexto, con todas las miradas puestas en el rival, el elenco de calle Rucci casi da la sorpresa, pero a falta de pocos minutos para el final un gol en contra de uno de sus defensores lo privó de volverse a casa con los tres puntos en el bolsillo.
Así, los dirigidos por Marcelo Zucotti dieron el primer paso para intentar dar el batacazo cuando se disputaban apenas dos minutos del encuentro. Tras un tiro libre desde la derecha ejecutado en forma de centro por Rodrigo Solís, a la altura del primer palo Ezequiel Gaido peinó el esférico para desviarle la trayectoria y por el otro poste apareció Elián Geremía para rematar de derecha y poner el 1 a 0.
Baldazo de agua helada para un conjunto dirigido por Claudio Crespo que inmediatamente fue en busca del empate. De esa manera, a los 5’ Leandro Zalazar quedó mano a mano con Juan López y definió por encima del arquero una pelota que picó en el travesaño antes de perderse en el saque de meta.
A pesar de esa ocasión, el dueño de casa era un muestrario de nervios tras el tempranero gol y, desesperado por revertir el mal comienzo de la tarde, cometió errores en la faz defensiva que le permitieron al “Aurinegro” contar con algunas situaciones como para ampliar la ventaja en el marcador. La más clara fue un cabezazo de César Contreras, tras centro de Paul Marinelli, que Diego Fantino sacó al córner mediante una gran volada.
Desde allí hasta el final de la etapa inicial cada equipo tuvo una clara chance de festejar. El local, a los 28’, cuando la pelota quedó boyando cerca del punto penal y Páez lo impactó un zurdazo que pasó cerca del palo izquierdo. La visita, a los 33’, por intermedio de otro tiro libre, pero desde la izquierda, realizado por Rodrigo Solís para que por la derecha llegara Contreras y definiera sobre la salida de Fantino un balón que se estampó en el travesaño. En el rebote llegó Maximiliano Bustos y punteó el esférico que terminó estrellándose también en el larguero.
El segundo tiempo no sería tan de ida y vuelta como el primero, sino que encontraría a Unión Central replegado en su campo de juego, intentando aferrarse al triunfo y apostando a lastimar de contragolpe, y al Atlético Ticino siendo superior en la posesión del balón, aunque sin gravitar en los metros finales.
En los minutos iniciales, lo más cerca que el combinado ticinense estuvo cerca del empate fue a los 6’ cuando Páez metió un zurdazo rasante que López contuvo en dos tiempos.
Luego el dueño de casa siguió teniendo la pelota, pero haciendo poco para revertir el resultado adverso.
La resistencia de Unión comenzó a derribarse a los 38’, momento de la tarde en el que su capitán Ezequiel Gaido se fue expulsado, correctamente, por doble amarilla. Un par de minutos después Zalazar ganó por la derecha, llegó hasta el fondo y metió centro atrás para buscar a Páez pero encontrando al defensor Matías Galiano que se llevó la pelota por delante y la metió dentro de su propia puerta, señalando así el 1 a 1.
Ese fue el envión anímico que empujó a los de Ticino para ir en busca del triunfo, pero a los 44’ una polémica decisión arbitral lo hizo desviarse de ese objetivo y entrar en el terreno del nerviosismo. Nelson Ledesma expulsó con roja directa al ingresado Leandro Freytes por una infracción sobre Sebastián Solís y con doble amarilla por protestar dicho fallo al defensor Claudio Ledesma.
Con nueve hombres en el campo de juego, Ticino comenzó a conformarse con la igualdad, más teniendo en cuenta que en tiempo de descuento casi vuelve a quedarse con las manos vacías. En uno de los tantos tiros libres ejecutados por Rodrigo Solís, Sebastián Solís peinó de espaldas al arco y la pelota se estampó en el travesaño.
La figura
Rodrigo Solís
Patrón en el mediocampo del “Aurinegro”, fue el eje del mediocampo a la hora de jugar y se puso el overol cuando tuvo que meter. Además complicó al rival con las correctas ejecuciones de los tiros libres en forma de centro. En el local el mejor fue Ayrton Páez.
El árbitro
Nelson Ledesma
Flojo arbitraje del referí cordobés. En el primer tiempo fue demasiado permisivo con las infracciones y se ahorró de sacar amarillas. Algunas de esas cartulinas que le faltaron las mostró equivocadamente en la parte complementaria e hizo enardecer a ambas parcialidades por entender que estaba compensando.