

Una verdadera multitud acompañó la imagen de San José en la procesión con que se homenajeó al Santo Patrono de Arroyo Cabral.
En esta oportunidad la particularidad fue que la misma tuvo varias paradas en su trayecto en lugares emblemáticos a lo largo de la historia del pueblo. Así, se reconoció a través de un decreto y el descubrimiento de una placa a distintos comercios que fueron parte fundamental de la vida comunitaria, como así también al Club Rivadavia en su centésimo aniversario.
Las firmas homenajeadas fueron Mercería Eduardo Bitar, La Casa de las Revistas, Panadería Amaya, Sodería Bertolotti-Alcalino, Almacén de Ramos Generales de Remo Merlat y Casa Alejandro Bitar.
Previo a la procesión, el obispo de la Diócesis de Villa María, monseñor Samuel Jofré Giraudo, procedió a bendecir la flamante unidad autobomba de los Bomberos Voluntarios, las bicicletas policiales y un auto que la Municipalidad recibió en comodato de la Justicia provincial.
Autoridades municipales encabezadas por el intendente Pablo Alcalino, el legislador provincial Darío Capitani, abanderados de los colegios y público en general se dieron cita en esta oportunidad para renovar la fe y caminar por las calles del pueblo junto a la imagen venerada de San José.
A su turno, Capitani habló sobre las bondades del autobomba conseguido a través de una gestión efectuada ante la Nación y destacó que “Arroyo Cabral cuenta con la única unidad que se ha destinado a la provincia de Córdoba.