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Trabajos difíciles durante el Festival

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Trabajos difíciles durante el Festival
“Por suerte, las personas cooperan”, dijeron Emilce y Juana, encargadas de los sanitarios del Polideportivo
“Por suerte, las personas cooperan”, dijeron Emilce y Juana, encargadas de los sanitarios del Polideportivo

Escribe: Pepo Garay ESPECIAL PARA EL DIARIO

Los naranjitas han sufrido distintas agresiones por parte de los usuarios del área de estacionamiento. Por su parte, los trabajadores de la limpieza realizan una de las labores menos deseadas, pero rescatan la “colaboración de la gente”.

 

Insultos y hasta agresiones físicas a los naranjitas

Uno de los 120 naranjitas que ordenaron el estacionamiento, frecuentemente maltratados por los conductores

En la reciente edición del Festival Internacional de Peñas, la organización y logística del estacionamiento le correspondió a la Liga Villamariense de Baby Fútbol (LVBF). Así, más de 120 “naranjitas” que representan a siete de las 23 instituciones deportivas que forman parte de la entidad, recorrieron las calles según su sector asignado, en un radio definido según los siguientes parámetros: inmediaciones del Sport Social Club, calles Jujuy (y Liniers, continuación de aquella), Tucumán y Cárcano/Italia (en Villa María) e inmediaciones del Prado Español y calle Marcos Juárez (en Villa Nueva).

Se trata de una actividad que da trabajo a personas que necesitan un ingreso para ellos y su familia y, fundamentalmente, que beneficia a los 23 clubes que forman parte de la Liga (y que tienen una importante función social), además de a media docena de comedores y merenderos infantiles de ambas villas (estas últimas recibirán, aproximadamente un 25% del total recaudado).

Con todo, la tarea de los naranjitas no ha sido fácil. Además de la brutal agresión física sufrida por uno de ellos el pasado sábado (informada por EL DIARIO oportunamente), la mayoría de los más de 120 trabajadores ha dicho haber recibido insultos y agresiones verbales de forma repetida por parte de los usuarios.

“Los chicos y chicas que trabajan como naranjitas han sufrido insultos, agravios y maltrato verbal de todo tipo. Nosotros no esperábamos caricias por parte de la gente, pero tampoco este nivel de violencia y agresividad. Hay que recordar que todo lo recaudado va para instituciones que cumplen una función social fundamental, y además ayuda a los trabajadores. La verdad es que hemos quedado muy sorprendidos por lo ocurrido. Ha sido una experiencia complicada”, comentó al respecto Pablo Martínez, dirigente de la LVBF.

 

Mucho trabajo para los miembros de la Cooperativa 7 de Febrero

Al igual que durante todo el año, los miembros de la Cooperativa 7 de Febrero estaban a cargo de la higiene de los dos baños públicos más cercanos al Anfiteatro, además de estar abocados a parte de la limpieza del área del “paseo peñero”. Eran más de 20 trabajadores que llevaron a cabo una de las tareas más difíciles y menos deseables en torno a todo lo que genera el mayor evento artístico del centro del país.  

En concreto, los cooperativistas desempeñaron funciones en los baños del Polideportivo y del sector de los juegos infantiles (ubicado en las inmediaciones del lago), donde realizaron dos turnos: de 9 a 16 horas y de 16 hasta la finalización de las actividades (usualmente entre las 4 y las 5 de la mañana). En cada uno de estos turnos, cumplieron horario dos trabajadoras (una para el baño femenino y otra para el masculino). Mientras tanto, otras 12 personas (seis por turno), llevaron a cabo las tareas de limpieza a lo largo y ancho del “paseo peñero”, desde las compuertas hasta el Anfiteatro.

“El trabajo durante estos días ha sido muy intenso. Hay cantidad de gente de todos lados, y estamos permanentemente entrando y saliendo a los baños, porque hay mucho recambio, es impresionante. Por suerte las personas cooperan, cuidan bastante”, aseguró Emilce Díaz, una de las encargadas del baño del Polideportivo.

En tanto su compañera, Juana Ojeda, agrega: “Por lo general la gente se comporta bastante bien. Hay excepciones, pero a grandes rasgos se ve educación, cuidan la limpieza. Lo mismo nos dicen nuestros compañeros con roles en la zona del paseo. En cuanto a las colaboraciones que dejan en la caja, también. No son grandes montos, pero ayudan en lo que pueden, y eso se valora”.