Un albañil domiciliado en barrio San Antonio de Villa Nueva fue condenado ayer a tres años de prisión efectiva, luego de ser hallado culpable de una serie de hechos delictivos que tuvieron como víctima a su expareja.
Se trata de Alejandro Facundo Vijande (21), alias “Mono” o “Monito”, quien fue declarado autor responsable de “amenazas reiteradas”, “coacción” y “desobediencia a la autoridad”, en el marco de una causa denunciada a principios del año pasado por quien había sido su novia, Judith Rubiano (22).
En febrero de 2016, la Justicia local dictó una orden de restricción que le impedía a Vijande mantener cualquier tipo de contacto con Rubiano, y mucho menos acercarse a ella, pero el trabajador de la construcción hizo caso omiso a la medida y el 4 de marzo se presentó en el domicilio de la joven para exigirle que reanudara la relación sentimental.
Siete meses después, más precisamente en horas de la madrugada del 1 de octubre, Vijande le envió 18 mensajes de WhatsApp con expresiones intimidatorias de distinto calibre, por lo que la víctima formuló la correspondiente denuncia penal. Y ante el incumplimiento de la disposición judicial de restricción, la Justicia ordenó la inmediata detención del agresor.
La audiencia de debate sustanciada en la víspera fue presidida por el camarista René Gandarillas y contó con la participación del fiscal Horacio Vázquez, del abogado Jorge Bustos (defendió a Vijande) y el secretario Guillermo Picco.
Cabe señalar que el acusado reconoció su culpabilidad en todos los hechos que se le endilgaban, por lo que el juicio se abrevió y sólo se tomaron los testimonios de dos efectivos policiales que tuvieron participación funcional en la causa: la cabo primero Paola Luján y el sargento Héctor Amici.