Lautaro, nuevo técnico “fortinero”, comenzará a trabajar el próximo lunes, a las 15, junto a su padre Carlos -de gran trayectoria en el ascenso del fútbol argentino- y el preparador físico local Eduardo “Tato” Bassi
En su rol de flamante entrenador de Alumni, Lautaro Trullet no quiso ayer meterse en cuestiones que todavía no tiene resueltas en el ámbito del plantel que conducirá para el Federal B, pero dejó en claro, como mensaje, que su idea primordial pasa por “el respeto por la pelota”.
“Siempre si uno le da buen destino a la pelota, se solucionan muchas cosas en el fútbol; ese respeto por el balón es lo que vamos a pedir, aunque siempre adaptándonos a los jugadores que tenemos”, remarcó ayer Trullet, en diálogo con EL DIARIO, pocas horas después de ser confirmado como el nuevo DT, en remplazo de Jorge Peñaloza.
De 39 años, casado con una villamariense, Trullet se radicó en la ciudad “hace cinco años, aproximadamente”, y desde entonces pareció encariñarse.
Aquí ya tiene su vida, como su mujer y sus pequeños hijos, uno de los cuales juega en el baby local, y además él sigue “despuntando el vicio” del fútbol en AFUCO. Y todo esto resultó determinante para optar por Alumni, por encima de todo.
“La verdad es que estoy muy contento; ya estoy radicado acá desde hace un tiempo y si bien a veces iba y venía como, por ejemplo, cuando tuve que partir a Corrientes hace poco, uno siempre tuvo la ilusión de trabajar en el fútbol sin irse lejos. Entonces quedarme a trabajar en lo que a uno le gusta y con mi familia contenta, a uno lo pone también muy feliz”, resaltó Trullet que, en ese sentido, destacó el agradecimiento de la dirigencia por tenerlo en cuenta.
Claro que durante los años que estuvo en Villa María Lautaro no hizo ruido y se mantuvo con su perfil bajo, en fiel reflejo de lo que siempre fue su papá, Carlos. De hecho, en ningún momento antes sonó como futuro técnico de Alumni, más allá de haber tenido experiencia como futbolista de Primera división y de ser ayudante de campo del mencionado técnico.
“Cuando podía iba a la cancha a ver a Alumni, no me perdía los partidos, pero siempre fui respetuoso de los trabajos de los demás técnicos; me parece que es lo que corresponde”, explicó el santafesino.
“Ahora se dio la coincidencia que Alumni buscaba técnico y justo no estaba trabajando, como también está la situación de que mi padre no está dirigiendo, entonces me parece que se tuvo que dar todo”, expresó.
Carlos Trullet, el padre, el hombre que tiene varios ascensos en su Currículum, llegará el lunes, proveniente de Rafaela (donde vive) para acompañar a Lautaro en el arranque de la pretemporada, como un asistente que conformará el nuevo cuerpo técnico del “Fortinero”.
“La idea es que él venga dos días a la semana durante los entrenamientos y nos acompañe también en los partidos”, dijo Lautaro, quien contará con la continuidad de Eduardo Bassi como preparador físico.
En los próximos pasos, en tanto, Trullet seguirá de cerca las gestiones de los dirigentes en cuanto al armado del plantel para ver con qué jugadores se encontrará de cara al próximo Federal B, que estaba estipulado para iniciarse el 31 de julio, pero aparentemente comenzará después.
“La idea es tener un plantel de 30 jugadores, con una base que ya viene jugando”, expresó el joven entrenador.
“Si se mantiene un base será importante, aunque ya sé de algunas bajas, pero vamos a ver esta semana”, añadió.
En ese aspecto, Lautaro espera que se concrete la continuidad de jugadores que vio muy bien en el torneo anterior, como el arquero Carlos Ronco y los volantes Juan Aimar y Santiago Aloi, entre otros.
“No es fácil porque fui jugador y sé que a veces uno busca lo seguro, a veces rápidamente; ojalá que se puedan quedar”, indicó el exlateral de Unión, Quilmes, Talleres e Instituto, entre tantos clubes.
De todos modos, Lautaro se abocará este fin de semana a pulir los últimos detalles de cara a la próxima experiencia, que dará puntapié inicial el próximo lunes, a las 15, en el predio del club.