Rivadavia derrotó 1-0 a Colón con un penal polémico y luego se clasificó a la final en la definición desde los doce pasos, donde el arquero Marcelo Berardo volvió a ser determinante
Escribe: Diego Pellegrini (h). Fotos: Osvaldo Carballo
Clásico verde. Fue una definición de película, con un guión atrapante, que tuvo en vilo a todos los fanáticos que se llegaron a la cancha. La polémica estuvo presente y la definición por penales también. ¿Qué más podía faltar?
Dentro de esta historia increíble, quien llegó a la victoria soñada fue Rivadavia, que luego de derrotar a Colón por 1 a 0, en los 90 minutos, se quedó con la definición desde los 12 pasos, por 3 a 2.
Fue un clásico de alta intensidad, que contó con todo. Situaciones de peligro, jugadas para la discusión, algunas piernas fuertes y el desenlace mencionado a pura emoción.
Pero lo mejor de la tarde, fue como ambos equipos, aceptaron el resultado y se cruzaron en un saludo fraternal, merced al resultado, que como no podía ser de otra manera, tuvo a Rivadavia excitado y a Colón cabizbajo.
¿Fue penal? Se preguntaron todos. Esa jugada del minuto veinticuatro del complemento fue un mojón en el pleito.
Quedaron dudas, pareció que no, pero puede que sí. Lo cierto es que Federico Tottis fue a disputar la pelota con Nicolás Gayoso y el juez marcó penal para el 1 a 0 del local, que llevaría todo al final ya conocido.
El clásico tuvo un libreto claro que se dio prácticamente desde el minuto 0 al 90.
La primera etapa fue clara. Rivadavia buscando con mucha intensidad y Colón esperando con orden. Al local le costó encontrar espacios siempre, salvo cuando al balón lo agarraba Nicolás Gayoso. El delantero ganaba siempre por la derecha y sus apariciones generaban desequilibrio en la última línea visitante.
A los cinco, fue la primera de Gayoso, pero su derechazo salió afuera, luego lo tuvo Leandro Zalazar, pero el disparo salió desviado y en la siguiente, otra vez el delantero cordobés lo perdió adentro del área, en lo que fue la chance más clara del local.
En Colón, luchaba todas las pelotas en soledad Matías Bendazzi, quien con poca compañía hacía lo que podía en ataque. Al visitante le costaba hacer jugar a sus hombres en ofensiva, por lo retrasado que estaba el equipo.
No obstante, en la primera etapa, la más clara fue para el Rojinegro con un remate de Pablo Torelli, quien de derecha la puso contra el palo y allí fue Marcelo Berardo para tapar lo que era gol de Colón.
El primer tiempo finalizó en cero, pero con el local instalado en campo contrario, manejando la pelota, sometiendo a un rival que se metía adentro del área para rechazar absolutamente todo, hasta los desbordes de Gayoso.
El equipo de Conti terminó defendiendo con mucha gente, apostando al pelotazo largo para Bendazzi y Diego Pereyra. Tuvo Colón una buena jugada individual de Martín Barrionuevo, quien a pura gambeta ingresó al área pero su “buscapié” no encontró otra camiseta roja y negra.
En el complemento la historia continuó siendo parecida al inicio. Con un Rivadavia apurado por encontrar el gol y Colón haciendo todo con tranquilidad por el resultado global a su favor. En el Verde ingresó Maximiliano Le Roux, para darle más profundidad a los suyos, mientras que en el visitante saltó a la cancha Federico Tottis, por el lesionado Ramiro Giraudo.
Así comenzó el equipo de Santoni otra vez a atacar al de Conti, pero las situaciones no eran claras, no fueron claras. Mientras, Colón minaba de gente su propia área. Ni las pelotas paradas podía aprovechar el local. Todo era de las manos de Federico Pedernera.
A los 10´, lo tendría con una clara chance el conjunto rojinegro, pero la aparición de Andrés Ferrero, con su derechazo potente, fue detenido por Marcelo Berardo otra vez. El clásico seguía empatado en cero, pero el global favorecía a Colón, quien jugaba con esa tranquilidad.
Pero a los 24´, llegaría la jugada más polémica de la tarde. Pelota al área para Gayoso, el delantero la aguanta y se perfila para definir, Tottis busca el balón desde atrás, yendo al suelo y Hugo Banegas marca el punto de penal. Todo Colón fue a protestar esa discutida decisión del colegiado y Gayoso agarró la pelota para el penal.
No dudó y con la derecha la clavó cruzado y arriba, para colocar el 1 a 0 a favor de Rivadavia.
De ahí en adelante el clásico se rompió, Colón nervioso, demoró varios minutos en digerir el gol en contra, mientras que Rivadavia no supo capitalizar el envión anímico por la apertura del marcador.
Claro que lo tuvo Maxi Le Roux, para definir la serie, pero su jugada con remate final, fue detenida excepcionalmente por el aquero Federico Perdernera. Esa era la jugada que le podría haber dado la clasificación al local, pero nada de eso sucedió y el juego se fue desinflando hasta el pitazo final. Con la intensidad y el calor, los dos terminaron viendo a los penales con buenos ojos y hacia allá fueron. El más fino fue Rivadavia, que igualmente erró dos y corrió peligro, pero Marcelo Berardo estuvo enorme deteniendo dos penales y Leandro Zalazar, frío como “témpano” para hacerse cargo del penal decisivo y decir que el Verde, en el año de su centenario, va por el título.
Las figuras: Nicolás Gayoso y Marcelo Berardo: Fueron los más destacados. El delantero estuvo en cada ataque peligroso de su equipo a puro desequilibrio. Le “cometieron” la infracción del penal, lo convirtió y luego, en la serie definitiva, también la mandó al fondo de la red. El arquero tapó dos pelotas de gol espectaculares en el partido, una en cada tiempo (a Pablo Torelli y Andrés Ferrero), luego en la serie de penales tapó dos disparos.
El árbitro: Hugo Banegas: Tuvo una tarde discreta, alternando entre buenas y malas decisiones. La jugada que marcó su trabajo fue el penal polémico que marcó, de Federico Tottis sobre Nicolás Gayoso. Dio la sensación de que no existió infracción, pero el juez ni dudó. En el resto del partido estuvo correcto y bien con las amarillas.
Los penales
-Barrionuevo (Colón): gol
-Gayoso (Rivadavia): gol
-Ferrero (Colón): gol
-Pedernera (Rivadavia): travesaño
-Pereyra (Colón): atajo Berardo.
-Villagra (Rivadavia): gol.
-Morre (Colón): atajó Berardo.
-Bustamante (Rivadavia): travesaño
-Bendazzi (Colón): afuera.
-Zalazar (Rivadavia): gol.