Un nuevo relato sobre la violencia existente en las calles de la ciudad. Esta vez la víctima fue una chica que es cadete de una farmacia
Una joven cadete denunció durante la tarde de ayer que fue agredida por dos hombres, padre e hijo, en un nuevo episodio de violencia contra una mujer.
Se trata de Micaela Villanueva, de 20 años de edad, domiciliada en barrio Avellaneda de Villa María, quien se presentó en la Redacción de EL DIARIO para hacer público el atropello que sufrió durante el pasado fin de semana.
La joven expresó que “ya hice la denuncia policial, al igual que una amiga, a quien también le pegaron” y que ahora el caso pasó al ámbito judicial, por lo que intervendrá su abogado.
Todo comenzó el sábado pasado, “alrededor de las 17, cuando venía con mi moto sobre la vereda porque se había roto”.
Villanueva refirió que el rodado sufrió la avería en Sarmiento y San Martín y, “desde allí, venía sobre la vereda llevándola a mano para dejarla en la casa de una amiga”.
Fue entonces cuando “a la altura de bulevar Sarmiento 1344 salieron dos hombres de un local donde venden zapatillas y los dos me empiezan a agredir de palabra”.
“No sé por qué motivo (el padre y el hijo) me atacaron, si yo venía llevando la moto que estaba rota”, al tiempo que agregó que en un momento el mayor de ellos “me pegó una patada”.
“Me dijeron de todo, pese a que yo intenté explicarles que iba por la vereda porque tenía la moto que no andaba”, refirió la joven, quien subrayó que “quiero que estos hechos se hagan públicos”.
Segunda agresión
Unos metros más adelante, poco antes de llegar a la esquina de Sarmiento y Pellegrini, “el hijo me siguió y, totalmente fuera de sí, me tiró una ‘piña’ en la cara que yo alcancé a cubrir, pero los mismo me lastimó el brazo (izquierdo) y me escupió”.
La joven cadete dijo que “me defendí como pude”, hasta que una chica de 21 años salió de un negocio “para defenderme” y fue entonces que “también le pegó a ella en la cara”.
A medida que crecía el tumulto, “también salió un joven para defendernos a las dos, mientras (el agresor) gritaba como loco” y “no paraba de golpear”.
Villanueva añadió que, pese a que llamamos a la Policía no vino y fue cuando el agresor “le tiró con medio ladrillo al muchacho que vino a defendernos”.
Las heridas
La denunciante, quien conoce el apellido de ambos agresores y así lo dio a conocer, los mantiene en reserva hasta que actúe la Justicia.
Por otro lado, Villanueva dio cuenta que “yo fui a hacer la denuncia, como me dijeron”, oportunidad durante la cual fue revisada por el médico policial, quien dejó constancia de una lesión en un hematoma que presentaba en su brazo izquierdo como de una lesión traumática en una de las piernas.
Apuntó, por otro lado, que a raíz de lo que le pasó pudo saber que otras personas también fueron atacadas por ambos sujetos.
“No me puedo explicar lo que hicieron, sobre todo el padre, que es una persona grande, quien no solo me insultó y hasta me pegó una patada, sino que también impulsaba a su hijo para que me agrediera”.
Finalmente, la joven cadete, quien presta servicio en una farmacia, reiteró que “jamás pensé que me harían esto, si yo no los conocía y no les hice nada”.