El presidente de la regional local del Colegio de Ingenieros Civiles habló de la alta demanda que hay en la ciudad para los profesionales y del nuevo rol que tienen que afrontar quienes ejercen esta especialidad
Los ingenieros celebran hoy su día y en épocas de bajas posibilidades laborales y alto desempleo, la afirmación que hizo el titular de la Regional 4 (abarca Villa María y el departamento) del Colegio de Ingenieros Civiles de Córdoba es un gran motivo para sumar al festejo. “Villa María es una tierra de oportunidades para los ingenieros”, opinó Hernán Estaurino (MP 4.069/x), titular de la entidad que en Villa María tiene sede en Mariano Moreno al 448.
“Acá actualmente hay demanda de profesionales y no hay para satisfacerla”, insistió el ingeniero, quien a su vez destacó que “en la regional somos 55 matriculados habilitados en el departamento” y que Villa María “es una ciudad que atrae ingenieros de otros lugares”.
“Nosotros abarcamos el Departamento General San Martín y según un estudio estadístico del Colegio es donde hay una de las mejores distribuciones de profesionales de la ingeniería civil, por lo que todos tienen trabajo y se dedican a distintas áreas”, subrayó y ejemplificó: “Hay quienes se dedican al calce de estructuras, otros que ejecutan obras, otros que son empresas constructoras, otros que se dedican a la agrimensura.
En cuanto a los nuevos profesionales, comentó que “la ingeniería civil es una carrera que se ha ido cerrando en el número de egresados”. “Cuando yo me recibí, hace 20 años, era uno de los más jóvenes y había un salto generacional porque pasaron unos 7 u 8 años hasta que empezaron a aparecer una cantidad de jóvenes interesante. De hecho, ahora, hay un plantel de jóvenes bastante importante”, resaltó.
“El Colegio invierte mucho dinero en promocionar la Ingeniería Civil, dando becas, por ejemplo, o con charlas.
Hoy la carrera está en Córdoba y hay planes de restituirse en San Francisco. En algún momento acá tuvimos la intención de hacer un acercamiento con la UTN, pero no está en los planes de incorporarla”, contó.
Estaurino reconoció que “es una carrera relativamente larga, pienso que le falta difusión y requiere de mucho trabajo, pero volvió a remarcar que “la ciudad y la región sostiene un crecimiento”. “Villa María está ubicada estratégicamente en la provincia y muchos de los ingenieros que están eran de otros lados y han elegido vivir acá”, planteó.
El nuevo rol
“El ingeniero civil tiene una formación amplia que tienen otras pocas carreras en la Ingeniería, lo que le da visión diferente del contexto entre quienes están formados en un área específica dentro de la Ingeniería. Generalmente el ingeniero civil es el que comanda todas las otras áreas específicas”, planteó sobre la actualidad de la especialidad el ingeniero José Alberto Falvo (MP 2.694/x), secretario del Colegio.
“En la actualidad el rol profesional del ingeniero civil es la coordinación con demás áreas específicas y/o afines, donde también él mismo puede ser partícipe de algunas de esas áreas”, destacó el presidente de la entidad y sostuvo que “no es un rol nuevo, en una obra el ingeniero civil está altamente capacitado para dirigir los diferentes ítems, acá se está desarrollando en Villa María la central hidroeléctrica, ahí un ingeniero civil es quien está manejando todos los movimientos dentro de la obra”.
A su vez, comentó que “el rol de coordinador es un liderazgo que implica la interacción con cierta cantidad de seres humanos involucrados en los distintos rubros e ítems en el caso de obras y de gestión ante distintos entes gubernamentales nacionales, provinciales y municipales con distintos niveles de requerimientos técnicos, legales y formales, lo que hace a la gerencia de gestión”.
“El ingeniero civil no ha sido entrenado solo para la gestión técnico-legal de obras y proyectos, sino también en liderazgo y gestión de seres humanos. Y es ahí donde la visión integral de la formación profesional funciona como líder-mediador. Liderazgo implica acción, por lo que la toma de decisiones es fundamental, y tiene que estar orientada a la búsqueda de resultados que impliquen soluciones eficaces, eficientes y sustentables dentro de la obra en sí misma, las personas que participan en ella durante la ejecución y posterior funcionamiento, y un impacto sobre el entorno y el ambiente que no dañe, ni vaya en desmedro de las condiciones de la naturaleza”, puntualizó Estaurino.
“En el Día del Ingeniero Civil la propuesta es postular a nuestra profesión, que con orgullo ejercemos, como una de las más importantes y responsables en el desarrollo de cualquier sociedad, con la relevancia que amerita”, concluyó el presidente de la Regional 4.
Esta noche, los ingenieros civiles de la ciudad compartirán una cena de camaradería para celebrar su día.
Cada 16 de junio se celebra el Día del Ingeniero en la Argentina. Es en conmemoración del inicio de la enseñanza de Ingeniería en el país. En 1855 Carlos Enrique Pellegrini -presidente entre 1890 y 1892- le propuso al rector de la Universidad de Buenos Aires crear la carrera.