
Sostuvo que son los mismos policías los que investigaron a sus pares, sacando “la manzana podrida”

El ministro de Gobierno Carlos Massei entregó ayer siete nuevos móviles policiales que ya se incorporaron a la flota de la Departamental General San Martín de la Policía de la Provincia de Córdoba.
También se entregaron seis unidades a la Departamental Unión.
“Avanzamos hacia una policía de confianza con el vecino”, indicó el ministro Massei, y señaló que, en total, son 205 los nuevos móviles, de los cuales 106 están distribuidos en las localidades del interior provincial y 99 en la capital cordobesa.
La presentación de los vehículos se desarrolló ayer a la mañana en un acto frente a la sede de la Departamental, en calle General Paz, con la presencia del intendente Martín Gill y numerosas autoridades del Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
En ese marco, Massei hizo foco en el concepto de una Policía “de aproximidad” y remarcó que el agente “tiene que estar a la par del vecino”, incluso yendo en bicicleta, a pie o en otro auto cuando no cuente con un móvil estatal.
“Queremos una policía amiga del vecino, comprometida con el ciudadano”, subrayó.
Dijo que ya fueron exonerados en la provincia 72 efectivos, “además de quienes han sido suspendidos o penados por el Tribunal de Conducta”. Estos datos lo llevaron a decir que los miembros apartados “fueron investigados, denunciados y atrapados por policías”, por lo que “a la manzana podrida la está sacando la misma policía”, destacó.
Inseguridad e inclusión
“Como política de Estado, trazamos un plan de prevención del delito basado en la seguridad humana y entendiendo que la inseguridad es hija de la exclusión. Por eso desde la educación, salud, cultura, el deporte y turismo van de la mano acciones para que los sectores más humildes, especialmente los niños y niñas, tengan igualdad de oportunidades”, expresó Massei.
Sostuvo que el Estado “tiene que estar presente en las barriadas populares y darles oportunidades” a las personas, para evitar que caigan en adicciones “y el facilismo”, que pueden llevar “a la carrera delictiva”.
En su discurso también hizo hincapié en el narcotráfico, “un problema que afecta al país, del cual Córdoba no está exento”. Dijo que “ha llegado para quedarse” y denunció que “hubo más de dos décadas sin política de fronteras”. En esto, dijo que Argentina pasó de ser un país de tránsito, a ser de consumo y de producción, y que la droga “atravesó todas los clases sociales”.