El Hospital Pasteur puso en marcha la Unidad de Cuidados Intermedios para niños desde un mes a 15 años. La falta de profesionales especializados es lo que causó la demora en el inicio del servicio. Falta habilitar la terapia intensiva para los más pequeños
El Hospital Regional Pasteur logró habilitar la sala de cuidados intermedios pediátricos que cuenta con cuatro camas, una de ellas, de aislamiento.
Desde el lunes ya están trabajando los profesionales abocados al nuevo servicio pero recién el miércoles se habilitó cuando ingresó el primer paciente.
Según informaron desde prensa del centro público de salud, los cuidados intermedios son destinados a aquellos pacientes que no tienen patologías complejas, pero sí riesgo de complicaciones y por eso necesitan monitoreo permanente. Esto no se puede ofrecer en la sala común.
Se diferencia de las salas de cuidados intensivos porque, entre otros aspectos, no puede albergar a pacientes que requieran respirador.
Desde mayo del año pasado, cuando se habilitó el nuevo edificio del Pasteur, se aguarda la puesta en funcionamiento de la terapia intermedia e intensiva pediátrica.
La dificultad no está en el equipamiento, que ya está instalado; sino en la carencia de recursos humanos especializados dispuestos a trabajar en un área crítica.
Es doble señalar que el problema para contar con pediatras especialistas en terapia no se observa sólo en la salud pública, sino también en el ámbito privado.
La terapia intermedia es para niños desde un mes de vida hasta los 15 años.
Cuenta con seis médicos y nueve enfermeros abocados especialmente a ese servicio.
La coordinadora es Eugenia Biagi.
“La intención del Hospital Pasteur es convertirse en un centro de formación de especialistas”, indicaron.
Cabe señalar que en el plantel médico de la sala recientemente habilitada hay una pediatra terapista.
No hay definiciones todavía sobre la Terapia Intensiva Pediátrica, servicio que es demandado pero que no cuenta con los especialistas necesarios para ponerlo en marcha. Actualmente, todos los niños que requieren cuidados intensivos son trasladados a Córdoba capital o a otros centros de salud de la provincia.
Lavadero
En otro orden, cabe informar que el Pasteur ya tiene funcionando en el nuevo edificio el servicio de lavandería, que hasta hace un mes seguía desenvolviéndose en la vieja estructura de la calle Mendoza.
Dado que era insuficiente la instalación para estar al día con la ropa de los profesionales, sábanas y el resto de las prendas que necesita lavado y esterilización, en muchas ocasiones debían llevar kilos de ropa a Córdoba, utilizando una vieja ambulancia para ese traslado.
Ahora, ya están en marcha los dos lavarropas, con capacidad para 60 kilos cada uno.
También tienen dos secadoras, dos hornos y una planchadora.
El equipamiento es del Hospital Pasteur, pero el servicio está concesionado a la empresa Servicios de Alimentos, de Córdoba capital, que es la misma que se encarga de la limpieza en el edificio.
El trabajo en el lavadero es de 16 horas diarias. Si se tiene en cuenta que en una hora se puede cargar dos veces cada lavarropa, se limpian casi 4.000 kilos de prendas por día.
La escasez de médicos pediatras terapistas, tiene un fuerte componente económico. Es más rentable y menos estresante para un profesional de la salud, especializarse en otras áreas no tan críticas. Y además, los pocos que existen, encuentran ofertas laborales fuera del país, tal el caso de Chile, que contrata a los profesionales argentinos por una cifra en dólares que no equiparan ni los hospitales ni las clínicas nacionales.
LAS CIFRAS
6 LOS MEDICOS QUE TRABAJAN EN EL NUEVO SERVICIO HABILITADO.
9 LOS ENFERMEROS CAPACITADOS ESPECIALMENTE EN LOS CUIDADOS DE NIÑOS.
4 LAS CAMAS DE LA UNIDAD DE CUIDADOS INTERMEDIOS PEDIÁTRICA DEL HOSPITAL PASTEUR.
