
El Enargas exigió una adecuación a la ley que impide que una compañía productora controle a una distribuidora de gas y la petrolera es dueña Metrogas, la más grande del país

Días atrás se conoció que la petrolera YPF venderá las acciones que posee de la distribuidora Metrogas, una operación que podría alcanzar hasta U$S1.000 millones y que significaría que esta última compañía pase a control privado.
Según consignó la agencia Bloomberg, trascendió que YPF contrató al Citigroup para concretar la transacción, si bien todavía resta definir si será por la totalidad de las mismas o una parte.
De acuerdo con la agencia, Citigroup fue seleccionado entre más de 10 bancos de inversión para asesorar en el que podría ser el mayor acuerdo de fusión-adquisición de Argentina este año.
Metrogas es la mayor distribuidora de gas del país, con más de 2,2 millones de clientes en Capital Federal y Gran Buenos Aires. El acuerdo para avanzar con esta operación se habría firmado la última semana y el proceso «comenzará en breve», señalaron fuentes cercanas a la firma.
Cabe destacar que YPF tiene el 70% de las acciones en su poder. El 30% restante se lo reparte entre ANSES (8,13%), el personal (10%) y acciones que cotizan en las bolsas de valores de Buenos Aires y de Nueva York.
YPF ya había dejado a Daniel González Casartelli, exbanquero con experiencia en M&A y actual CFO de la compañía, al frente de Metrogas, en lo que se anticipaba sería un inminente plan de desinversión.
En caso de que la petrolera se desprenda de ese 70% de participación, una estimación preliminar de TPCG Capital SA prevé que la transacción podría alcanzar una cifra de alrededor de U$S700 millones. En tanto, la consultora AR Partners estimó un valor cercano a los U$S1.000 millones.
Si YPF venda el 21% de los papeles para dejar de tener una participación mayoritaria en la distribuidora de gas, entonces la operación podría alcanzar los U$S210 millones, según TPCG Capital SA.
Las razones de su salida
Por un lado, con esta movida YPF lograría recortar parte de los U$S8.300 millones de deuda, estimaron desde IProfesional.com. Pero la principal causa está vinculada con cuestiones regulatorias, dado que las normas prohíben que una compañía como Metrogas esté controlada por una firma que también sea productora de gas.
Sin embargo, fue durante el gobierno de Cristina Kirchner que se le dio «luz verde» y se le permitió avanzar con la operación. Fue en abril de 2013 cuando la petrolera pasó a tener el control absoluto y se hizo cargo del management de Metrogas.
Sin embargo, la transacción generó polémica y puso a los organismos reguladores bajo la lupa, ya que la ley de privatización del gas (Ley del Gas 24.074), que había sido sancionada en 1992, impide a una empresa productora y transportadora -como es YPF- asumir el control de una compañía distribuidora de las características de Metrogas.
La norma había sido sancionada por el gobierno de Carlos Menem y dispone restricciones muy claras respecto de la composición accionaria de las empresas que forman parte de la cadena de ese recurso energético. Esa limitante había sido incluida para evitar que se generen conductas anticompetitivas, monopólicas o discriminatorias.
Fuente: Iprofesional